La Comisión Europea (CE) no abrirá un expediente de infracción a Francia por las expulsiones de gitanos después de que París "respondiera favorablemente" al ultimátum de Bruselas para que corrigiera su legislación sobre libre circulación de ciudadanos comunitarios.
"Francia ha hecho aquello que le ha pedido la Comisión", afirmó la comisaria europea de Justicia, Viviane Reding, en un comunicado de prensa en el que aseguró sentirse "satisfecha" del resultado final.
"El colegio de comisarios ha decidido suspender la investigación en curso después de que Francia haya respondido favorablemente", explicó minutos antes el portavoz de Reding, Mathew Newman. "La CE está satisfecha con las garantías dadas por Francia" de no expulsar a nadie si no es por "representar una seria amenaza" y siempre aplicando el principio de "caso por caso", dijo.
Francia respondió el pasado viernes en el último día de plazo a la petición de Bruselas de subsanar su legislación sobre libre circulación so pena de abrirle un procedimiento de infracción el pasado 29 de septiembre.
La comisaria señaló que "seguirá atenta" para comprobar que "los compromisos de Francia son cumplidos totalmente".
El Ejecutivo comunitario, instauró en septiembre un grupo de trabajo para examinar la situación de los romaníes en la Unión Europea y las estrategias que se llevan a cabo tanto a nivel nacional como comunitario.
Las expulsiones de gitanos acapararon la actualidad comunitaria los últimos meses, más aún desde que Reding las comparase con las deportaciones de la Segunda Guerra Mundial, una afirmación que desató la indignación del presidente francés, Nicolas Sarkozy, y su Gobierno.
La decisión de la CE de no iniciar un procedimiento de infracción contra Francia no ha sido muy bien acogida por algunos colectivos. Así la Unión Romaní ha anunciado acciones ante el Tribunal de Justicia de la Unión Europea contra el Gobierno francés por persecución de gitanos.
Mientras tanto, una coalición de organizaciones humanitarias europeas lamentó ayer la decisión de Bruselas, que tiene en cuenta el compromiso de París de corregir su legislación nacional para adaptarla a la libre circulación de ciudadanos comunitarios, constituye "un mensaje equivocado", en opinión de la llamada Coalición Romaní.
El grupo, integrado por diez organizaciones (entre ellas la sección europea de Amnistía Internacional y la española Secretariado Gitano), considera que la CE, al centrase en el futuro, "no da justicia a los que ya han sido víctimas de discriminación y han perdido sus hogares en las últimas semanas", según indicó su portavoz en un comunicado.
Más atención. Sin entrar a valorar la decisión adoptada ayer por la Comisión Europea, el ministro de Asuntos Exteriores y de Cooperación español, Miguel Ángel Moratinos, pidió ayer a la UE que preste "más atención" a la "problemática" de la población gitana apostando por una política de "integración" de estas comunidades. Así se pronunció en rueda de prensa conjunta con su colega rumano, Teodor Baconschi, de visita en Madrid.