Los 20 trabajadores despedidos del servicio de recaudación tributaria del Ayuntamiento de Alcalá de Guadaíra, ARCA, siguen luchado por mantener su puesto de trabajo. Para mantener viva su lucha hoy instalarán una mesa informativa para asesorar de forma gratuita sobre la gestión tributaria a todos los ciudadanos que reclamen su asesoramiento.
Esta mesa se instalará a las 10.30 horas y permanecerá hasta las 12.30 horas junto al edificio de ARCA, donde ofrecerán un servicio que el alcalde y senador socialista, Antonio Gutiérrez Limones, se ha encargado de suprimir, según denunciaron.
Y es que el trabajo que ejecutaban estos 20 empleados hasta el 31 de diciembre está paralizado, porque ahora sólo hay siete funcionarios municipales que lo realizan, según denunció ayer el delegado sindical de CCOO, José Luis García. Por este motivo, criticó, están completamente estancados los departamentos de Resoluciones, Ejecutiva e Inspección, manteniéndose sólo de un 8 a un 10 por ciento la gestión y, con serias dificultades la atención al público, insistió García.
Según los datos que maneja CCOO, más de 2.000 cartas están pendientes de notificar del padrón de basuras, hay más de 7.000 apremios correspondientes al segundo semestre del IBI que no han salido aún, y las liquidaciones de plusvalías, entre otras, se encuentran pendientes y paralizadas desde la segunda quincena de diciembre.
Así, la decisión de la junta de Gobierno local de cesar a la empresa privada a la que habían sido cedidos los trabajadores de la recaudación ha conllevado la consiguiente paralización del servicio. Por ello, mientras en enero de 2013 la recaudación del Ayuntamiento ascendió a 450.000 euros, este mes de enero la recaudación no va a llegar ni al 10 por ciento de esta cantidad, según García, que, en su opinión, si el Ayuntamiento sigue sin recaudar tememos que puedan peligrar las nóminas de los 500 trabajadores municipales.
El sindicalista explicó que la cesión del servicio de recaudación al Organismo Provincial de Asistencia Económica y Fiscal (Opaef) aún no se ha realizado, porque se tiene que aprobar en pleno y éste no se ha celebrado, y además existe la posibilidad de que la oposición lo rechace. Por ello reclamó al Gobierno local que readmita a los 20 trabajadores despedidos del servicio.
