El plazo estipulado de reposo oscila entre los 45 días y los dos meses, período que concretará la rehabilitación a la que se someterá el arquero heliopolitano. En función de los plazos de recuperación previos, el ex guardameta del Valladolid reaparecía a primeros de septiembre y, por ende, se ausentaría del derbi del 21 de agosto ante el Sevilla.
El canario será operado esta tarde, aunque ha sido citado por el doctor Pérez Hidalgo a primera hora de la mañana para someterse al preoperatorio. Fabricio, que ayer aterrizó en San Pablo, se lesionó en el primer entrenamiento en Hondarribia tras chocar de forma fortuita con el canterano Juanito Calahorro.
más damnificados. Fabricio no es el único inquilino de la lista de damnificados que maneja el responsable deportivo del área de salud del Real Betis, el cordobés Tomás Calero. Uno de los que se ha recuperado de sus dolencias es el veloz extremo ecuatoriano Jefferson Montero, afectado por una intensa contusión lumbar y que en el día de ayer se entrenó con total normalidad. Hoy podrá ser alineado por Pepe Mel en el triangular benéfico que se celebrará en Irún ante el conjunto anfitrión, el Real Unión, y Osasuna.
En el plano negativo, Damián, Cañas y Mario padecen unas dolencias más intensas. El caso que más inquieta al propio Tomás Calero es el del mediocentro argentino Damián Petcoff. El canterano recibió un considerable impacto en el cuádriceps en el encuentro ante el Girondins y hoy viajará a Irún para someterse a unas pruebas que descarten una rotura fibrilar.
Otro de los damnificados tras el bolo ante el Girondins es el mediocentro Cañas, aquejado de una contractura en el recto. Por recomendación del galeno heliopolitano, hoy no será alineado en el triangular de Irún.
Otros inquilinos de la enfermería verdiblanca son el central Mario, que padeció un fuerte pisotón en la clausura de la Copa Bayona, y Juanma, que prosigue ejercitándose al margen a causa de sus continuas sobrecargas. Chica, con una media subluxación del hombro, ya entrena con total normalidad y a un ritmo alto a las órdenes del madrileño Pepe Mel.
