El secretario general adjunto de CDC, Felip Puig, ha asegurado que no descarta un pacto estable más adelante entre el PSOE y CiU si José Luis Rodríguez Zapatero cambia radicalmente de actitud respecto a Cataluña, y ha lamentado que CiU no defendiera "con pasión" sus planteamientos en campaña.
En una entrevista en TV3 recogida por Efe, Puig ha asegurado que CiU tenía "bien orientada" su campaña, pero que "quizá no la interpretamos con suficiente pasión". Puig ha dicho que estas elecciones se jugaban "en el combate del miedo (al PP) o de la defensa de la dignidad de Cataluña", y que CiU no ha sabido jugar "con suficiente pasión este combate emocional".
Ha remarcado que no culpa de ello al candidato de CiU, Josep Antoni Duran Lleida, puesto que "la decisión estratégica fue compartida", pero sí ha comentado que CDC y UDC tuvieron momentos "de no suficiente cohesión". También ha dicho que los problemas de salud de Duran "han podido influir en la campaña", y ha añadido que del resultado electoral hay que hacer "una revisión autocrítica", pero sin "flagelarse".
Ha lamentado que CiU no haya sabido subrayar que PP y PSOE "son dos caras de la misma moneda" y que el PSC consiguiera hacer olvidar todos los problemas con las infraestructuras en Cataluña, y ha dicho que, en consecuencia, Convergencia i Uniò debe hacer una "reflexión sobre su estrategia de comunicación".
Preguntado por si su formación contempla un pacto estable de legislatura, un pacto de Gobierno o bien entrar en el Ejecutivo de José Luis Rodríguez Zapatero, ha asegurado: "Ya veremos". Ha dicho que CiU es "muy escéptica" sobre que Zapatero pueda cambiar, pero ha añadido: "No podemos cerrar esta puerta".
Sin embargo, ha dejado claro que para que Convergencia i Uniò se avenga a un pacto estable, el PSOE debería asumir "todo un contrato con Cataluña" que incluyera el traspaso de Cercanías, del aeropuerto de El Prat, y un modelo de financiación y de unas inversiones dignas.
