Fernando Cano-Romero no ha escrito un pregón en su vida y aún no ha pensado cómo será el que pronuncie el próximo 10 de abril para anunciar la Semana Santa. Pero sí tiene claras dos cosas: que será el pregón de un “católico profundamente convencido, de fe inalterable, vinculado a la Iglesia sevillana por las raíces profundas que son su cofradías”, y que será una disertación de hoy, en un contexto “muy distinto al de hace 15 o 20 años”, cuando “el pregonero no tenía que plantearse asuntos como la droga, el aborto, la eutanasia, o las familias rotas y destrozadas que quieren romper y destrozar aún más”.
En su primera comparecencia tras ser elegido pregonero por la Junta Superior del Consejo General de Hermandades y Cofradías, el jerezano de 73 años Fernando Cano-Romero Méndez dejó claro, el mismo día en que el papa Benedicto XVI criticaba el “laicismo agresivo” de la sociedad española, que hará un pregón “conforme a lo que la Iglesia nos demanda en este momento”.Tras la polémica del año pasado, cuando el pregonero Antonio García Barbeito hizo gala de su personalísima interpretación de la fe y el vínculo con las cofradías levantando alguna que otra ampolla, el Consejo ha elegido a un pregonero sin aristas, que ayer consideró que quizá la Macarena “tenga más que ver” que él mismo en su elección, y que pidió ayuda a la ocupante de la basílica para la redacción de su texto, el primero que escribirá psee a haber sido pregonero incontables veces, incluido el Pregón de las Glorias hace 25 años.
“Hay por ahí una leyenda oscura que dice: Fulanito tiene escrito su pregón. Pues yo no he escrito nunca en mi vida ningún pregón, ni conferencia ni disertación. Yo soy un orador, pero esta vez tendré que escribirlo, porque se publica de inmediato. Cuando pronuncié el de las Glorias, para publicarlo tuvieron que sacarlo de las cintas del magnetófono”, contó. Poco más le ha dado tiempo a pensar, porque desde que recibió la llamada del presidente del Consejo, Adolfo Arenas, ha estado respondiendo al teléfono “a dos manos, entre el fijo y el móvil”. Entre tanta felicitación, recibió la de la delegada de Fiestas Mayores, Rosamar Prieto-Castro, y la del arzobispo Juan José Asenjo a través de un miembro del Consejo, al estar el prelado en Santiago de Compostela en la visita del Papa.
El pregonero estuvo acompañado en esta primera aparición pública por su esposa, tres de sus cinco hijos, familiares, y hermanos mayores de cofradías como el Dulce Nombre de Bellavista, a la que Cano regaló la imagen de su titular, el Señor de la Salud, y de la que es hermano mayor honorario. El pregonero pertenece también a las hermandades sevillanas de la Macarena, Los Estudiantes, la Cena, la Hiniesta, San Gonzalo y la Pura y Limpia del Postigo del Aceite; y a las jerezanas de la Coronación de Espinas –desde el día de su nacimiento–, los Dolores, El Amor y la Sacramental de Santiago.
Nacido en Jerez de la Frontera, “hijo de andaluza de Jerez de la Frontera y extremeño de Jerez de los Caballeros, considera que es difícil superar su jerezanismo”, según la semblanza enviada ayer por el Consejo, que añade que “de la mano de su abuela aprendió a rezar delante de las que hoy son las dos grandes devociones en su vida: la Esperanza Macarena y el Cristo de la Buena Muerte, cuando coincidieron en la iglesia de la Anunciación” en los años 40.Licenciado en Derecho, se casó con una jerezana a los pies de la Macarena y vive en Sevilla hace casi 40 años. En la actualidad está jubilado. El presidente del Consejo dejó claro ayer qué espera de su texto: “Que sea cofrade, que tenga su parte lírica y que sea actual, un pregón de hoy”.
