El alicantino David Ferrer se proclamó campeón del III Masters Internacional de Málaga al derrotar en la final al toledano Feliciano López por 6-4 y 6-2. Fue para el de Jávea una forma de recobrar sus galones tras imponerse a uno de los héroes de la final de la Copa Davis, en la que él apenas pudo aportar una derrota.
Si Ferrer no las tuvo todas consigo en Mar del Plata, todo lo contrario le ocurrió a Feliciano, que anotó para España el primer punto de la eliminatoria ante Argentina tras batir a Juan Martín del Potro y luego añadió el de dobles, junto a Fernando Verdasco. Ayer las cosas volvieron a su versión más lógica, la que impone el ranking ATP. Así, el alicantino, finalista en la edición del pasado año ganada por Rafa Nadal, derrotó en una hora y doce minutos al castellano-manchego.
El primer set fue el más igualado aunque progresivamente David Ferrer se mostró más centrado y metido en el partido y en el noveno juego le rompió el servicio a Feliciano López y cerró el set por 6-4 en el siguiente juego.
En el segundo set, Ferrer comenzó rompiendo el saque ante un rival que parecía perdido pero que en el 4-2 reaccionó para integrarse en el choque. Con todo, el alicantino, muy perseverante, le rompió por tercera vez el saque, colocándose con un 5-2, y en el último juego Feliciano López intentó alargar el partido pero definitivamente no pudo con la solidez de David Ferrer.
Almagro-Robredo. El murciano Nicolás Almagro y el catalán Tommy Robredo se medirán hoy en la final del Masters Nacional-Copa del Rey que se disputa en Ferrol, tras derrotar de forma respectiva en las semifinales por 6-4 y 6-2 al barcelonés Albert Montañés y por 1-6, 7-5 y 6-4 al madrileño Fernando Verdasco, defensor del título.
Almagro, que ya se deshizo con facilidad de Daniel Gimeno (6-1 y 6-4) en los cuartos de final, volvió a demostrar que se encuentra un escalón por encima, en el apartado físico, que el resto de sus rivales. Por su parte, Robredo, vencedor de la edición de 2005, supo reaccionar frente a un Verdasco que pareció cansado.
