El Ministerio de Fomento ha pedido a AENA que abra una investigación para determinar las causas del apagón del sábado por la noche en la T-4 de Barajas. El corte en el suministro se debió a una subida de tensión en un centro de transformación, según los primeros datos disponibles.
El ente público gestor de los aeropuertos españoles asegura que "de manera casi inmediata se activó una segunda central eléctrica, que hizo que se restablecieran, paulatinamente, todas las funciones" y la normalidad se recuperó a las 00.00 horas del domingo. Con la apertura de la investigación, el responsable del Ministerio, José Blanco, pretende aclarar lo sucedido y determinar el correcto funcionamiento de los sistemas redundantes de suministro eléctrico. AENA ha anunciado que hará público el resultado de la investigación.
La avería dejó sin funcionar escaleras eléctricas, ascensores, ordenadores, puertas anti-retorno, el Sistema Automatizado de Tratamiento de Equipajes (SATE) y el tren automático de transporte de viajeros entre el edificio principal y el satélite de la Terminal 4, entre otros. Varios de los viajeros afectados comentaron a Efe que se vivieron escenas de tensión y que hubo altercados entre los viajeros debido al nerviosismo. Iberia fue la compañía más afectada por este fallo eléctrico, ya que tenía programados media docena de vuelos de largo radio alrededor de la medianoche.
La compañía aseguró que todos estos vuelos partieron hacia sus destinos, aunque algunos con retrasos, ya que se demoró la carga de los equipajes, que en algunos casos no pudieron subirse a las bodegas de los aviones y se espera entregar a sus dueños en las próximas horas.
AENA destacó que el aeropuerto de Barajas ya operaba ayer con normalidad en la tercera jornada de la operación salida y regreso de las vacaciones de agosto, en la que había programados 1.155 vuelos. Sin embargo, las pantallas de información al viajero de las terminales 1 y 2 señalaban ayer por la tarde retrasos, principalmente en los vuelos domésticos y de medio radio, de una media de entre 20 y 30 minutos.
Fuentes aeroportuarias confirmaron a Efe que desde primera hora de la tarde el aeropuerto de Barajas operaba en configuración sur, situación que puede provocar demoras, ya que los aviones han de variar su ruta habitual de despegue para hacerlo en contra del viento.
