Cuando empezaban a remitir las convulsiones en el PP, el propio presidente fundador del partido, Manuel Fraga, reabrió el debate. El senador popular dijo ayer que no descarta la creación de una gestora en el PP de Madrid para resolver los conflictos que afectan a la formación tanto a nivel interno como con la dirección nacional porque, según aseguró, "la unidad del partido está por encima de todo".
Preguntado por la Cadena SER sobre si descartaba la gestora en Madrid, Fraga respondió: "Yo no descarto nada". Por otra lado, cuestionado por si a él le temblaría la mano para poner orden en el partido, subrayó que si fuese su mano la que tuviese que actuar "el tema ya estaría resuelto". "Todo el mundo sabe que yo estuve ahí al frente de las operaciones. Soy el presidente fundador, pero dicho esto, no se ha hecho mal. Entiendo que se irá a la unidad definitiva del partido y que los ausentes tienen razón", subrayó. Tras destacar que siente "una gran estima" por el alcalde de Madrid, Alberto Ruiz-Gallardón, manifestó que no le gustó "nada en absoluto" el informe que Cobo ofreció el pasado martes ante el Comité Ejecutivo del PP sobre sus declaraciones a El País.
"Cuando oí el informe de Cobo el otro día allí no me gustó nada en absoluto, de modo que vamos a ver si encontramos la salida definitiva. Pero se ha dado un paso adelante, se ha resuelto el tema de Caja Madrid, una de las instituciones principales financieras de España, y el partido salva su unidad básica. Ahora, siempre habrá personalismos, inevitablemente los ha habido siempre en política y yo confío en que se superen", sentenció.
También precisó que las palabras del vicealcalde en el Comité Ejecutivo le parecieron "intolerables" porque "en lugar de dar explicaciones por lo que había hecho anteriormente, insultando a una persona, se metió en acusaciones no probadas". "Fue lamentable su informe, a mi no me gustó nada", apostilló.
Finalmente, a la pregunta de si cree que el presidente de la Generalitat valenciana, Francisco Camps, seguirá siendo líder en el futuro, el presidente fundador del PP declinó responder alegando que no lo sabía, aunque dio su apoyo a la alcaldesa de Valencia, Rita Barberá, para ponerse al frente del partido valenciano porque, "no en vano, ha habido trajes arriba y trajes abajo". "Se ha trajinado demasiado", añadió.
conflictos. La portavoz del Grupo Popular en el Congreso de los Diputados, Soraya Sáenz de Santamaría, aseguró ayer, sin embargo que está "convencida" de que "no serán necesarias medidas" en el PP de Madrid para resolver los conflictos regionales y en la dirección nacional.
"Yo creo que todos hemos hecho en estos días una reflexión profunda de cuál es nuestro papel en el partido y nuestra responsabilidad y estoy convencida de que todos los dirigentes del PP están de acuerdo con eso", dijo.
Otra opinión expresó el presidente del PP vasco, Antonio Basagoiti, quien aseguró que, si se mantiene "el derbi madrileño" entre Aguirre y Gallardón, los miembros del PP "acabarán siendo del Alcorcón". Aseguró que en el Comité Ejecutivo "atisbó" que "la gente estaba harta" de luchas.
La polémica ex diputada popular Montserrat Nebrera fue otra de las personas que hablaron ayer sobre la crisis interna para decir que Rajoy ha perdido una "oportunidad preciosa" de reformar el PP y ganar en democracia interna.
