Las relaciones entre el Betis y el Benfica son tan magníficas que, hace unos meses, Miguel Guillén y Rafael Gordillo acudieron al Estadio de la Luz para presenciar un encuentro del conjunto que entrena Jorge Jesus invitados por el propio club encarnado, que por cierto es uno de los acreedores más importantes de la entidad verdiblanca por el traspaso de Nelson. Es más, el Benfica también iba a firmar su adhesión al convenio de acreedores del club de Heliópolis, pero no lo hizo por una simple formalidad. El caso es que el vínculo entre ambas instituciones es excelente y por ahí intentará el Betis afrontar la operación de Nolito... y la de Franco Jara. Porque no hay un futbolista benfiquista que interese al Betis, hay dos. Jara es un delantero argentino que en la campaña recién concluida ha jugado cedido en el Granada y ya fue tanteado muy en serio por el club de La Palmera en la recta final del mercado veraniego de 2011.
Este atacante, de 23 años, cumple una de las exigencias de Pepe Mel: se desenvuelve a la perfección por la banda, sobre todo la izquierda. Así lo describió ayer Juan Sabas, segundo técnico del equipo nazarí, en Canal Sur: "En lo personal es correctísimo, es muy buen profesional, muy familiar y un futbolista interesante. Tiene mucha velocidad y un buen desborde. A veces peca de llevar mucho la pelota, pero es muy competitivo". En el Granada convirtió tres goles.