Resulta curioso que, comparado con otros hechos históricos que se dilataron más en el tiempo, los cinco años en los que el mundo se vio envuelto en la Segunda Guerra Mundial hayan suscitado la aparición de tantísimos libros, películas y cómics como ha habido desde 1945.
Frau Tovarich viene a sumarse a todos ellos con una historia bienintencionada a la que le pueden sus ambiciones: Matsuura, de dibujo aún tosco, parca definición de personajes, escueto desarrollo de escenarios y poco control sobre la narrativa en los momentos de acción, nos narra en el cómic la doble historia del enfrentamiento de nazis y rusos en territorios de los segundos y de cómo los primeros salvan a una correo rusa de ser violada por parte de sus compatriotas.
Un arranque que, si bien resulta interesante, queda rápidamente ahogado por el verdadero objetivo del autor, indagar en los motivos que impulsan a luchar a uno de los personajes, un alemán marcado por la tragedia y la pérdida de su familia.
