El líder libio, Muamar Gadafi, instó ayer a sus partidarios a marchar hacia Trípoli para "depurar" la capital de rebeldes, a los que definió como "ratas, cruzados e infieles". En un mensaje de audio difundido por canales de televisión leales al régimen, Gadafi se mostró más desafiante que en sus recientes alocuciones y llamó a todas las tribus del país a unirse: "Salid de vuestras casas, liberad Trípoli. No dejéis la ciudad a esas ratas, matadlas", señaló Gadafi después de que los rebeldes hayan ofrecido la amnistía a quien lo entregue vivo o muerto.
"Libia es para el pueblo libio y no para los agentes, no para el imperialismo, no para Francia, no para Italia", prosiguió el líder. "Trípoli es para vosotros, no para aquellos que confían en la OTAN", añadió Gadafi, instando a los jóvenes y a los líderes tribales a tomar el control de sus barrios de manos de los rebeldes y a marchar luego a la capital para "purificarla". Las últimas palabras del líder libio hacen referencia a la ayuda que la OTAN está brindando a los rebeldes para capturar a Muamar Gadafi y sus hijos con servicios de inteligencia y reconocimiento, según confirmó el ministro de Defensa británico, Liam Fox, a Sky News.
Sin embargo, el portavoz de dicha organización, Oana Lungescu, aseguró que su objetivo no es buscar a Gadafi y que no existe coordinación entre las Fuerzas de la Alianza y los rebeldes. "La OTAN no apunta a ningún individuo específico" y "no hay coordinación militar con los rebeldes", precisó.Cuatro días después de la entrada de los rebeldes en Trípoli, los enfrentamientos entre tropas opositoras y gadafistas continuan en varios puntos de la capital, donde el Consejo Nacional de Transición celebró su primera reunión y dio la bienvenida a "cualquier negociación" con los grupos de las zonas aún controladas por las fuerzas leales para evitar más muertos.
Pero, los combates se avivan y un intenso tiroteo rompió ayer la calma frente al hotel Corinthia, donde se aloja toda la prensa internacional, mientras que centenares de rebeldes lanzaron una ofensiva sobre un complejo de apartamentos del barrio de Abu Salim, donde creen que se ocultan Muamar Gadafi o sus hijos. No obstante, otras fuentes rebeldes citadas por la CNN apuntan a que podría ocultarse en las inmediaciones del aeropuerto, donde también se registraron intensos combates. Pero, de momento, el paradero de Gadafi se desconoce y más de 30 cadáveres acribillados con disparos que corresponderían a supuestos combatientes leales al líder libio fueron encontrados en un campamento militar en el centro de Trípoli. reconstrucción.
El Consejo de Seguridad de la ONU acordó ayer desbloquear 1.500 millones de dólares de los bienes libios congelados para financiar la reconstrucción del país. Ante la inminente caída del régimen de Gadafi, los representantes del Grupo de Contacto para Libia celebraron una reunión urgente para allanar el camino a la transición y, si bien pidieron a los rebeldes "evitar el castigo y la venganza", instaron a Gadafi y su círculo a entregarse a la justicia de inmediato para evitar un baño de sangre y la destrucción de la infraestructura nacional".
