El nuevo consejo de administración del Betis está pendiente de una reunión para redefinir las funciones de cada uno de sus miembros, pero las líneas maestras no admiten demasiado debate y cada componente sabe a qué se dedicará. Diego García León ayudará al ahora vicepresidente, Fernando Casas, en la gestión económica, mientras que Tomás Solano, arquitecto de profesión, hereda el apartado de instalaciones, del que se encargaba Pablo Gómez Falcón. Además, el nuevo presidente ya ha anunciado que quiere nombrar un secretario y un vicesecretario (será abogado) para «controlar los temas judiciales».
