El empresario Eusebio Gaviño ha pasado la noche en prisión después de que el juez del caso Camas ordenase su detención, tras sus reiteradas ausencias al juicio alegando problemas de salud. Pese a las advertencias del magistrado Javier González -"no deje de venir", le espetó después de que los forenses rechazaran su incapacidad para comparecer-, el imputado en el caso del presunto soborno a una concejal de Camas volvió a hacer caso omiso. Su abogada, Encarnación Molino, alegó que su hijo le había informado de su ingreso ayer mismo en el Hospital San Juan de Dios de Bormujos, pero las reiteradas suspensiones del juicio provocadas por el empresario, alegando ataques de ansiedad y problemas de salud mental, agotaron la paciencia del juez, que no dudó en dictar una orden de busca y captura y su ingreso en prisión provisional, comunicada y sin fianza, para "asegurar su presencia y la celebración" del juicio. Así lo habían solicitado tanto el fiscal como la acusación del PSOE. Por la tarde fue detenido por la Guardia Civil ya fuera del hospital y trasladado primero al juzgado de guardia, según confirmó la Benemérita, y luego a prisión.
En su orden de busca y captura, el juez requería la presentación de Gaviño "en el plazo más breve posible" en el juicio, ya que "se requiere la presencia del acusado para la celebración" del mismo, según Europa Press. El magistrado recordaba que los informes médicos-forenses solicitados tras sus reiteradas incomparecencias, y realizados el lunes en la Audiencia, dictaminaron que el acusado estaba en condiciones de declarar. Remachó además que como "no se ha aportado un mínimo principio objetivo de prueba que justifique la incomparecencia en el día de hoy [por ayer], es más que razonable colegir la existencia de sólidos indicios racionales de que Gaviño viene obstruyendo deliberadamente la celebración del juicio oral", que ayer volvió a suspenderse.
El juez consideró "preciso" decretar su prisión provisional para "asegurar su presencia y la celebración del juicio" que se sigue por un presunto delito de cohecho contra Gaviño, el exalcalde de Camas Agustín Pavón (IU); y los exconcejales Antonio Enrique Fraile (PP) y José del Castillo (PA). Argumentó que es una medida cautelar regulada para, entre otros fines, garantizar "el normal desarrollo del proceso" y evitar la "obstrucción" de la acción judicial.
Durante una vista previa a esta decisión, la abogada del acusado, Encarnación Molino, informó al magistrado de que el hijo de su cliente le había indicado en conversación telefónica que su padre estaba ingresado en el Hospital de San Juan de Dios. Tras ello, el secretario de la Oficina del Jurado, Luis Revilla, leyó un informe médico "sin firma y con sello" que el hospital había remitido por fax a la Audiencia en el que se informaba de que el Gaviño había acudido a urgencias ayer. El juez pidió a las partes que se pronunciaran para decidir si continuar con el juicio o disolver el jurado. El fiscal aludió al informe de los forenses y señaló que "lógicamente, pretende ponerse fuera del alcance del tribunal", por lo que se opuso a la disolución del jurado ya que se trata de "una obstrucción a la acción de la Justicia que no debe ser, encima, beneficiosa" para el imputado.
LAS PARTES
El abogado que ejerce la acusación particular en nombre del PSOE se adhirió a la petición del fiscal al entender que Gaviño "se está enajenando a la acción de la Justicia", mientras que el letrado del exalcalde de Camas se opuso a disolver el jurado porque el "interés" de su cliente es que se celebre la vista oral, pero no se pronunció sobre la ausencia de Gaviño porque "no sabemos si no quiere venir o no puede venir". Las defensas de los otros dos imputados consideraron "excesiva" la prisión preventiva y solicitaron seguir el juicio sin él. La abogada del empresario solicitó la suspensión al considerar que "existen otros informes médicos que dicen que no está en condiciones de asistir al juicio y declarar" y "su declaración no se prestaría con las debidas garantías" al no estar en "condiciones" para comparecer.
