El Gobierno central y la Junta iniciarán en julio la transferencia de las competencias para que la comunidad tramite los permisos de trabajo de los inmigrantes, una competencia que recoge el nuevo Estatuto y que la Junta espere tener "en pocos meses".
La consejera de Gobernación, Clara Aguilera, se reunió ayer en Madrid con el ministro de Trabajo e Inmigración, Celestino Corbacho para abordar este traspaso, que se esperaba culminar antes de las pasadas elecciones del 9 de marzo. Hace un año se constituyó una ponencia técnica para perfilarlo aunque será a partir de julio cuando un grupo de trabajo ponga en marcha la transferencia, si bien tendrá su "desarrollo fundamental" a partir de septiembre. Aguilera espera que "en pocos meses" esté concluida la transferencia.
El artículo 62 del Estatuto andaluz fija que la comunidad asumirá "la competencia ejecutiva en materia de autorización de trabajo de los extranjeros cuya relación laboral se desarrolle en Andalucía", una fórmula que implica que la competencia es estatal pero la Junta la gestiona.
Así, una vez culminado el traspaso será el Servicio Andaluz de Empleo (SAE) y no las subdelegaciones provinciales del Gobierno las responsables de tramitar los permisos de trabajo a extranjeros. Según el Estatuto, la competencia incluye la tramitación y resolución de las autorizaciones iniciales de trabajo, la tramitación y resolución de los recursos presentados a dichas autorizaciones y la aplicación del régimen de inspección y sanción, además de las políticas de integración y participación social, económica y cultural de los inmigrantes.
Aguilera consideró la transferencia permitirá "condicionar las necesidades de personas a la demanda de empleo".
