El objetivo es que este edificio albergue en un futuro un Centro de Interpretación del Barroco Andaluz, dentro del proyecto Guadalquivir, que pretende convertir el cauce en el eje del desarrollo socioeconómico del interior de la comunidad autónoma. "Los Descalzos es una pieza más, muy importante, en esta gran ruta del interior de Andalucía que tenemos que consolidar, ya que aumenta el valor de nuestra oferta en la medida en que da a conocer un patrimonio que, en muchos casos, es desconocido para los visitantes", subrayó el presidente de Andalucía.
Por su parte, el consejero de Cultura, Paulino Plata, concretó que el proyecto consiste en "que se coloquen definitivamente en Los Descalzos una parte de los contenidos que han estado en la exposición itinerante con el programa Andalucía barroca, muchísimos materiales que harán que se conozca la dimensión y el alcance del periodo en la comunidad autónoma". Para ello, en tres meses se constituirá una comisión mixta formada por las tres instituciones para elaborar el reglamento de uso del templo.
La rehabilitación del edificio contó con un presupuesto de cinco millones de euros, financiados por la Junta de Andalucía. Las obras habían terminado hace más de un año, pero hasta ayer no se reabrió al público este Bien de Interés Cultural (BIC), lo que había motivado quejas.
La construcción de este templo comenzó en 1601 dentro del antiguo convento de los Carmelitas Descalzos, que había sido fundado en 1591 en Écija. El convento, salvo la iglesia y la sacristía, fue demolido en 1960 para la construcción de viviendas, lo que supuso el aislamiento y olvido del edificio, así como su posterior deterioro, por lo que hace 12 años cerró sus puertas. El conjunto muestra un auténtico tesoro del Siglo de Oro, con frescos parietales, retablos, canceles, púlpitos y un órgano.