El técnico del Barça, Pep Guardiola, explicó ayer en rueda de prensa que el partido de esta tarde ante Osasuna es “una buena prueba de fuego”, un encuentro que “marcará el futuro” de su equipo, después del miniciclo que los azulgranas deben afrontar antes del nuevo parón liguero de noviembre.
“Vamos a un campo que de por sí, históricamente, es duro. Están en su mejor momento de la campaña. Camacho les salvó la temporada pasada y en ésta están muy bien”, afirmó. “Es un partido muy importante, por la dificultad, por la prueba antes del partido que tenemos en Rusia. Cuanto mejor entremos en una buena dinámica, mejor para el partido decisivo contra el Kazan”, dijo Guardiola, quien recordó que el año pasado en Pamplona “jugamos con peligro de perder, es un partido con riesgo”.
Además, aprovechó la ocasión para defender al francés Thierry Henry, quien recibió el alta médica después de dos semanas de baja, y podría jugar algunos minutos en el Reyno de Navarra.“Henry volverá a callar muchas bocas”, vaticinó el técnico, quien considera lógicos los comentarios que se vierten sobre Henry, porque se trata de “un jugador de otro nivel”.
PUYOL, CULÉ HASTA 2013. En clave blaugrana también fue actualidad ayer el capitán Carles Puyol, que firmó su ampliación de contrato hasta 2013. El jugador, de 31 años, ya anunció la semana pasada el acuerdo entre las partes y que sólo faltaba la firma. Tras la misma declaró estar “muy contento por la confianza que me han depositado desde el club”.
