Pep Guardiola, ayer en la rueda de prensa en Yokohama.
El entrenador del FC Barcelona, Josep Guardiola, afirmó ayer que su equipo no puede considerarse "el mejor del mundo" hasta que no logren alzarse con el Mundial de Clubes que se disputa en Japón y en el que debutarán el próximo jueves.En una rueda de prensa celebrada tras el primer entrenamiento del equipo, Guardiola instó a sus jugadores a "no perder la oportunidad de ganar" el torneo, ya que se trata de un título "muy prestigioso y muy importante" que "llega muy pocas veces". Para el entrenador del Barça, "el deseo y las ganas de ser campeones del mundo" son suficiente motivación para preparar a sus futbolistas de cara al primer partido de semifinales que disputaran contra el Al Sadd qatarí, rival al que comenzó a estudiar ayer por la tarde.
Los jugadores "son conscientes de que es una competición muy dura" y en la que "puede haber muchas sorpresas", añadió Guardiola, que se mostró ilusionado por volver a enfrentarse a un equipo de Qatar, después de haber militado como futbolista en ese país, del que guarda "buen recuerdo". Para el entrenador ahora lo más importante es que sus jugadores se adapten al horario local (ocho horas más que en España), que disfruten del tiempo libre y que se preparen para los próximos partidos sin olvidar de que a lo que han venido es "a ganar", dijo.
En la multitudinaria rueda de prensa que tuvo lugar en la sede del equipo en Yokohama, muchas de las preguntas giraron en torno a sobre su principal competidor, el Real Madrid, al que ganaron el sábado pasado por 1-3.
EL CLÁSICO. En ese sentido, Guardiola recordó que el Real Madrid "son líderes" y fue "nombrado mejor equipo del siglo XX", con lo que a pesar de "haber tenido la suerte de ganarles en los últimos partidos", considera que están "muy cerca siempre el uno del otro".
Para Guardiola volver a Japón "es siempre un honor" y aseguró que tienen la responsabilidad de "enseñar lo mejor", además deseó que Japón "se recupere pronto de esta tragedia", en referencia al terremoto y tsunami que asoló el noreste del país el 11 de marzo, y espera aprovechar esta visita para poder disfrutar de "su comida".
El Barcelona fue recibido de madrugada por centenares de aficionados japoneses en el aeropuerto de Narita, a las afueras de Tokio, y esta misma mañana se ejercitó en el campo de entrenamiento del equipo local Yokohama Marinos.
