Hoy mismo empezarán los trabajos para desviar los servicios afectados (luz, agua, telefonía y gas) y simultáneamente se procederá a habilitar los primeros cortes, según fuentes de la delegación de Movilidad, que resaltan que la Policía Local se encargará de velar de que el tráfico sea fluido en las calles aledañas. Por eso se hará hincapié en multar y retirar los coches en doble fila, aunque todavía no está claro cuántos agentes participarán en este operativo. Y es que los trabajos obligarán a desviar unos 12 patrulleros por la mañana y por la tarde, pero no hay acuerdo con los policías para que hagan horas extra, así que los vehículos tendrán que detraerse de los barrios.
El sindicato mayoritario, el Sppme, decidió la semana pasada instar a los policías a que comiencen a pedir los días libres que les deben, en protesta por el incumplimiento de los acuerdos firmados con el Ayuntamiento de Sevilla sobre creación de puestos de trabajo, horas extra e instalaciones policiales. Y hay policías con un centenar de descansos atrasados.
Lo cierto es que, antes del inicio de los trabajos, circular por las calles del recorrido alternativo, en hora punta, suponía toda una odisea. El pasado viernes la calle Tabladilla, inicio del nuevo itinerario hacia la zona del Aljarafe, era todo un ejemplo del mal de la doble fila. Aunque a priori es una calle con dos carriles de circulación, la presencia de los vehículos mal aparcados dificultaba el paso de los coches. Un hecho que se agrava según se avanza por ella.
Trabajadores y vecinos de esta calle habían encontrado en la doble fila, hasta el día de hoy, la solución a sus problemas de aparcamiento. Así, no era extraño observar cómo los empleados de la Consejería de Agricultura o del cercano club Antares no dudaban en aparcar sus coches de forma indebida, contando para ello con el beneplácito de los aparcacoches de la zona. De este modo, la calle Tabladilla se estrechaba a un solo carril por el que difícilmente puede circular un vehículo de emergencias.
Otra de las vías afectadas hasta hoy por estos aparcamientos es la calle Antonio Maura. Con el inicio de las obras se ha convertido en la vía de acceso a la zona de Nervión desde el Aljarafe. Su estrechez, unida a la mala práctica de los conductores al estacionar, la convierten en una calle muy complicada para el tráfico rodado. Cardenal Ilundain, con dos carriles de circulación en cada sentido, no se libra de la picaresca de los conductores. Al escaso número de aparcamientos permitidos en esta vía había que sumar coches en doble fila, e incluso vehículos subidos encima de aceras o estacionados junto a placas de prohibido aparcar.
Con todo esto, hoy se pone en marcha la ruta alternativa a Cardenal Bueno Monreal. Un trayecto que, antes de las obras y debido a la doble fila, ya suponía un quebradero de cabeza para los conductores. Algo que durante todo un año se encargará de corregir la grúa.