O. Granado / A. Morente
La guerra por el control de la sociedad que gestionará Megapark, el mayor parque industrial de Andalucía, ha estallado entre varias de las firmas que conforman el conglomerado de empresas encargado del proyecto. Una junta general extraordinaria abordará la crisis, en la que el Ayuntamiento intenta mediar para sellar la paz.
Detrás de Megapark hay siete empresas, algunas de Dos Hermanas: Arcona (con el 25% del capital) y Al-Andalus, Bogaris, Baremo, Clipeus, Delta y Rusvel, con el 12,5% cada una. El orden del día de esta junta general extraordinaria, que se celebrará el 15 de abril, refleja un choque frontal entre tres de estas firmas, Arcona, Baremo y Bogaris. Esta última exige la destitución de los consejeros de Arcona y Baremo "por negarse a devolver" a Megapark "las cantidades indebidamente percibidas por los contratos de promoción delegada y administración y gestión, respectivamente".
También Bogaris quiere votar el inicio de acciones legales contra estas dos empresas y, si se acuerda la destitución de los consejeros, designar a los nuevos. Pero hay más: en un orden del día con hasta 14 puntos se incluye otro por el que Arcona y Baremo pretenden "apercibir a Bogaris para que, en lo sucesivo, se abstenga de seguir incumpliendo el acuerdo entre accionistas". El hecho de que la convocatoria se haya hecho dejando tan al descubierto las fuertes discrepancias da una idea de la tensión que reina en el grupo.
Este conflicto llega en un contexto clave ya que próximamente habrá que proceder a una ampliación de capital para empezar a construir este año, una vez que cuenta con todos los permisos, incluido el de la Comisión Asesora de Comercio Interior (CACI) de la Junta de Andalucía, obtenido en diciembre de 2008.
De hecho, la situación preocupa al Ayuntamiento de Dos Hermanas dado que el proyecto de ampliación de La Isla, que duplicará su superficie hasta superar las 500 hectáreas para consolidarse como el mayor polígono de Andalucía, es de los más importantes del país. La preocupación gira en torno a que se pueda ralentizar, aunque no hay dudas de que el proyecto seguirá adelante, entre otras cosas porque el grupo depositó en su día una fianza de 60 millones de euros.
El alcalde, Francisco Toscano (PSOE), confirmó que el Ayuntamiento de Dos Hermanas se ha dirigido al grupo para ofrecerse como mediador. "Lo que sería lamentable es que un proyecto que ha tenido que superar tantas trabas se embarranque ahora por esto", subrayó, en referencia a las largas negociaciones seguidas para conseguir los suelos de Lugar Nuevo, que es por donde se ampliará La Isla.
En los mismos términos se pronunció el portavoz del equipo de gobierno, Agustín Morón, quien aclaró que hasta ahora no se ha producido ningún retraso porque el proceso ha seguido su curso con normalidad, pero reconoció que "urge solucionar estas diferencias".
