El presidente del Real Betis, Miguel Guillén, se reunió el pasado fin de semana con el presidente del Comité Técnico de Árbitros, Victoriano Sánchez Arminio, para tratar de solucionar la crispación que generaron en el colectivo arbitral las declaraciones del dirigente del club heliopolitano.
Sánchez Arminio telefoneó a Guillén antes de la reunión para tratar de limar las asperezas surgidas después del polémico arbitraje de Álvarez Izquierdo en el Betis-Atlético de Madrid, en el que expulsó a Damien Perquis y Joel Campbell. Guillén le hizo ver en un clima de armonía a Sánchez Arminio el malestar existente en el entorno del club del Villamarín por los últimos arbitrajes sufridos por el conjunto de Pepe Mel.
