"En la quinta del Gürtel, Arenas es delantero centro". "Chaves es el autor intelectual de un montaje contra Arenas". Sirvan estas dos píldoras, la primera del portavoz socialista Mario Jiménez y la segunda del secretario general del PP-A, Antonio Sanz, para dar una idea de cómo está el ambiente en el Hospital de las Cinco Llagas, sede del Parlamento andaluz. Un día después de que saliera a la luz el sumario del caso Gürtel, de que los socialistas pidieran responsabilidades directas a Javier Arenas y el PP replicara anunciando varias querellas, la tensión política no se ha rebajado en la antesala del pleno que esta tarde debatirá de nuevo sobre el pago de la llamada deuda histórica.
Los socialistas afilan los colmillos. En su estreno como portavoz, Mario Jiménez, que mantuvo un desayuno con periodistas, se presentó ofreciendo directamente su DNI para facilitar al PP la presentación de una querella. El día anterior la anunciaron contra la consejera de la Presidencia y portavoz, Mar Moreno, y la secretaria de organización del PSOE-A, Susana Díaz.
Ambas se dirigieron a Arenas para pedirles explicaciones después de que en el sumario figurara que el cabecilla de Gürtel, Francisco Correa, declaró que entró en el PP de la mano de Luis Bárcenas, y que en aquel partido las decisiones sobre contratos las tomaba un grupo de cinco personas entre las que situó a Luis Bárcenas, Francisco Álvarez Cascos, Jesús Sepúlveda y Javier Arenas.
Jiménez, que gasta un estilo muy diferente al de su antecesor, Manuel Gracia, demostró que los socialistas van a poner en marcha una estrategia más bronca y deslizó que aprovecharán el pleno y cada intervención pública para exigir al líder del PP andaluz que dé explicaciones sobre su papel en la trama corrupta que apunta a la presunta financiación irregular del Partido Popular.
El secretario general del PP-A, sin embargo, aseguró que los populares dieron el martes todas las explicaciones posibles para "demostrar" que las acusaciones contra Arenas eran "falsas" y exigió al PSOE que haga lo mismo con el caso Poniente, que investiga la trama corrupta en El Ejido.
Sanz dijo que "al menos veinte dirigentes socialistas están implicados" en la operación y situó al vicepresidente tercero del Gobierno, Manuel Chaves, como el "muñidor" del acuerdo PSOE-PAL para "aniquilar" al PP en el municipio almeriense. Es más, el dirigente popular acusó a Chaves de orquestar un "montaje" contra Arenas propio de quien tiene "odio y rencor".
