El Ayuntamiento dio el lunes un nuevo paso en su estrategia de agilizar el sistema de recaudación de impuestos y multas. En el Boletín Oficial de la Provincia se publicó un listado de más de 45.000 vecinos con multas de 2008 impagadas. Se reclaman cerca de cinco millones de euros y se da un plazo de seis meses para activar medidas como el embargo.
La Delegación de Hacienda ha activado dos grandes campañas de recuadación. La primera, vinculada al impago de tributos dio pie el pasado mes a un buzoneo masivo de más de 20.000 notificaciones. La segunda, tiene como objetivo una población mayor: cerca de 50.000 personas y empresas aparecen en el listado de deudores del Consistorio. Son sanciones de tráfico de este ejercicio o de finales del pasado, cuyos infractores no han podido ser localizados. Las multas oscilan entre 50 y 200 euros principalmente por aparcamientos en doble fila o irregulares.
Los casi 50.000 expedientes que aparecen publicados en el BOP son sólo una parte de los iniciados este año por el Ayuntamiento. Se trata únicamente de los que no han podido ser localizados en sus viviendas en las últimas semanas -hay infracciones detectadas entre septiembre y octubre que están ya publicadas- y, en consecuencia, el Consistorio ha iniciado un proceso para recabar el dinero. Estos ciudadanos tienen quince días para pagar el importe pendiente o para presentar alegaciones. De no hacerlo, el Consistorio dará el tercer paso previsto: remitir una notificación de apremio a estas personas que, de no responderse, se ejecutará con medidas como el embargo. Según fuentes del área de Hacienda, para que esto ocurra transcurrirán seis meses.
Sólo con este proceso el Consistorio podría recaudar casi cinco millones de euros, una cantidad incluso superior a la presupuestada para todo el ejercicio -un cálculo que se realiza según los ingresos obtenidos el año precedente- que ascendía a 4 millones de euros. El PP ya denunció en el último Pleno que esta cifra se había sobrepasado sensiblemente. Según los datos de la liquidación difundidos por la oposición, hasta octubre se habían recaudado ya 7,3 millones de euros. Una cifra que aumentará sensiblemente cuando concluya este nuevo proceso y que derivará en que se dupliquen los ingresos por sanciones de tráfico respecto a los previstos en 2008.
La mayor parte de las infracciones denunciadas se corresponden con los artículos 91 y 94 del Reglamento General de Circulación, lo que se corresponde con las irregularidades relacionadas con aparcamientos y paradas en lugares indebidos y los estacionamientos en doble fila. El elevado número de vehículos afectados responde así a la campaña de control de la doble fila, lanzada en el inicio del mandato -para este plan se adquirió el denominado coche ponemultas cuyo funcionamiento era inicialmente de carácter público, con informaciones de los lugares que recorrería, pero que se modificó debido a los numerosos fallos que se detectaron en él-. Cuando se trata de incumplimientos más graves de la normativa, el Ayuntamiento incorpora en el BOP los puntos que se restan del carné de conducir.
Desde el área de Hacienda matizaron que no se trata de un proceso excepcional, aunque admitieron que responde al nuevo modelo de trabajo de la Agencia de Recaudación -que ahora se integrará en la Agencia Tributaria-. Todo el sistema se ha organizado de tal forma que los procesos se agilizan para no dejar que prescriban las sanciones.
De hecho, los plazos están muy ajustados. Se han incluido en este proceso infracciones realizadas hasta el mes de septiembre. Y se gestionarán todas a la vez. De este modo, en menos de un mes serán remitidas las notificaciones de apremio, el último aviso previo a los embargos.