El Ministerio de Hacienda ha rechazado los planes de ajuste presentados por los ayuntamientos de los municipios sevillanos de Almensilla, El Coronil, Martín de la Jara, Olivares, Valencina de la Concepción y Osuna para acogerse al plan de pago a proveedores impulsado por el Gobierno, según ha informado este viernes la Diputación apoyándose en un informe elaborado al respecto por el Organismo Provincial de Asistencia Económica y Financiera (Opaef).
Además, dicho estudio concluye que el 65 por ciento de los 72 consistorios sevillanos que han presentado estos planes se verán "obligados" a subir impuestos para cumplir sus previsiones de ingresos, mientras que "casi la mitad" tendrán que recortar personal.
Son las consecuencias "demoledoras y perversas" que, a juicio del presidente de la Diputación de Sevilla, Fernando Rodríguez Villalobos (PSOE), acarrean estos planes, que ha vuelto a criticar al considerar que, con ellos, "los únicos que ganarán serán los bancos y las grandes empresas", mientras los alcaldes se quedan en una situación de "indefensión absoluta".
De esta manera, según este estudio, 35 de los 72 ayuntamientos adoptarán recortes de personal como "medidas de reducción de gasto" que les permita cumplir sus previsiones, ha explicado Villalobos, quien ha concretado que esas reducciones de plantilla se acometerán "amortizando plazas, reduciendo eventuales y personal político, eliminando temporales, no cubriendo plazas vacantes, no sacando nuevas plazas o no renovando contratos", entre otras opciones.
Es uno de los datos que se desprenden del informe elaborado por el Opaef que la Diputación, según Villalobos, "se ha visto obligada" a realizar "con recursos propios" ante el "oscurantismo" con el que, en su opinión, está llevando a cabo este proceso el Ministerio de Hacienda.
Igualmente, según las cifras de la Diputación, 47 de los 72 ayuntamientos aprobarán, para aumentar sus ingresos, subidas de impuestos como el IBI, las tasas de basura y agua, las revisiones catastrales y los de tracción mecánica.
Se trata de medidas que, a juicio de Villalobos, "lastran el poder local", porque conllevarán un empeoramiento de los servicios y una "merma del prestigio" de los consistorios, y que son fruto de una "maniobra orquestada" del PP con dicho fin.
"En lugar de acosar con planes agresivos a los ayuntamientos y amenazarlos con fusiones entre ellos, el Gobierno debería ofrecer más transparencia en su gestión y abrir la mano para que los consistorios no se vean, como ya de hecho están, entre la espada de reducir plantilla y la pared de subir impuestos', ha sentenciado Villalobos en esta línea.
