Cultura

Honores a un maestro de la guitarra y el cante de sabor

el 01 dic 2011 / 21:08 h.

José Menese, en una imagen de archivo en el Lope de Vega, participará en el homenaje a Manolo Brenes.

A don Manuel Delgado Lara, conocido por el remoquete artístico de Manolo Brenes por haber nacido en esta bella localidad sevillana (1928), se le presenta siempre como un destacado guitarrista, pero es algo más que un gran maestro de la sonanta. Los que hemos tenido la oportunidad de echar con él algún que otro ratito de arte en la intimidad sabemos que es también un cantaor estupendo, de los que escasean ya tanto como los billetes de 500 euros. Recuerdo una noche en Torres Macarena, el templo jondo de la sevillana calle Torrijiano, en la que resucitó a María la Moreno con unos cantes suyos de un sabor alamedeño increíble.

El maestro conoció como pocos el ambiente flamenco de la Alameda de Hércules, donde vivieron siempre los flamencos desde mediados del siglo XIX. Quienes han escrito de la Alameda flamenca han destacado siempre la época que va desde el final de la Guerra Civil del 36 hasta finales de los años setenta. Pero en el siglo anterior ya vivieron en este rincón de Sevilla artistas tan importantes como Silverio Franconetti, José Lorente, La Carbonera, Paco la Luz y sus hijas, las hermanas Antúnez, La Macarrona y La Malena, Chacón con sus padres cuando el genio de Jerez era todavía zapatero, La Junquera y Frijones, el Maestro Pérez y El Perote de Álora, que era su yerno; La Geroma, las Coquineras y un montón más de artistas fundamentales. Ya en el siglo XX llegaron los Pavón, el Niño Medina, Currito el de la Geroma, Juan Mojama, La Moreno, El Cuácua...

Manolo Brenes es quizás de los pocos que todavía puedan hablarnos de aquel ambiente, de un rincón de Sevilla que alguien definió como la Universidad del Flamenco. Hijo de la Niña de Brenes y el guitarrista José de Carmona, se crió entre artistas y muy pronto se convirtió en un guitarrista imprescindible para conducir el cante de destacados maestros de su tiempo, lo que le llevó a grabar con los mejores y a ser durante años el guitarrista exclusivo de José Menese cuando el morisco estaba en todo su apogeo y revolucionaba el cante desde la jondura y las bellas coplas de Moreno Galván. Este maestro de la guitarra, del cante y de la conversación flamenca va a recibir hoy un más que merecido homenaje en el Teatro Central de Sevilla organizado por la Federación Provincial de Entidades Flamencas de Sevilla, en el que van a tomar parte José Menese, El Junco, Carmen Ledesma, El Chozas, Manuela Cordero, Rosario La Tremendita, Manolo Franco, el Niño de Pura, Antonio Carrión, Pedro Sierra y Eduardo Trassierra, además de los que componen los dos cuerpos de baile. Será un gran homenaje.

Ojalá el maestro reciba algo más que aplausos y olés, porque necesita de la solidaridad de todos nosotros. Sería importante que llenáramos el teatro. También necesita el maestro nuestro reconocimiento por tratarse de un gran artista al que los años han alejado de los escenarios estando todavía en plenitud de facultades. En cualquier arte los años son siempre un valor importante; en el flamenco, a veces, solo son un problema. Cuánto podría enseñarnos a todos Manolo Brenes ahora que tanto queremos aprender.

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