Aparcado ya el asunto de la Copa del Rey, sellado con antelación y creces el primer objetivo de la temporada, el Cajasol de Joan Plaza tiene ante sí una ocasión formidable para, siguiendo los deseos de voracidad expuestos por el técnico-milagro, seguir acumulando en la despensa con vistas a lograr una mayor recompensa cuando enfile abril.
En esa línea, y dando por sentado que asaltar Vistalegre no va a ser tarea sencilla –sólo lo ha hecho esta temporada el insaciable Regal FC Barcelona–, el conjunto sevillano encara una bonita oportunidad para terminar de dejar claro, por si alguien aún lo duda, que es el conjunto revelación y una seria amenaza para, al menos, sembrar la inquietud entre los grandes. Y es que hoy puede ser un día redondo.
Un día redondo como sugería el eslogan del famoso pastel con agujero en el centro. Y, para redondearlo, bien vale festejar una efeméride que no se cumple todos los días: 750 encuentros del Caja en la Liga ACB (356 victorias y 393 derrotas desde 1989 hasta hoy).
Aunque, ya puestos, no está de más pecar de golosos y celebrarlo a lo grande con el bombón de la victoria, que además en este caso haría la número 100 del entrenador que ha logrado transformar una pléyade de jugadores mediocre y desorientada en un bloque compacto e inasequible al desaliento en apenas meses.
Más cifras para un partido que debe ser muy distinto al que se jugó en el Velódromo de Dos Hermanas: el Caja es el segundo equipo con mayor porcentaje de victorias en la cancha merengue (47,6% fruto de un balance 11/10 en los precedentes); Andrés Miso ha ganado hasta media docena de veces en la pista del Real Madrid; se miden dos de las tres mejores defensas (67,41 puntos encajan de media los sevillanos; 71,41 los capitalinos)...
Y, junto a los números, los protagonistas: Joan Plaza y Zan Tabak vuelven a su casa; Miso y Reyes, cuatro años junto en Estudiantes, se retan; lo mismo que Kirksay, Savanovic y Lavrinovic, juntos en el Unics Kazan hace dos campañas.
Alicientes múltiples para un Cajasol que no gana a domicilio desde el 28 de noviembre en Fuenlabrada, y que también ganó en la pista de Estudiantes. Un tercer triunfo en Madrid sería encauzar una temporada... redonda.
