Las sensaciones que la Semana de la Industria Metalmecánica de Andalucía (SIMA) celebrada en Sevilla ha dejado en sus organizadores no pueden ser mejores. Estiman que más del 45 % de los encuentros entre tractoras y pymes podrán dar lugar a relaciones comerciales a corto y medio plazo.
Desde el pasado miércoles día 8 hasta ayer viernes día 10 de octubre, el Palacio de Congresos de la capital hispalense acogió 1.416 encuentros entre empresas tractoras internacionales y subcontratistas andaluzas. Reuniones de 20 minutos en las que las empresas buscaban identificar necesidades recíprocas y oportunidades de negocio.
Del resultado de estos encuentros, en los que han participado 30 empresas tractoras y 151 pymes andaluzas, los organizadores del evento calculan que un 32 % tienen muchas posibilidades de consolidarse como relaciones comerciales a corto plazo, y el 14,3 % a medio plazo. La práctica totalidad de las grandes tractoras, cabe destacar, anunció su intención de repetir en esta clase de encuentros en base a su experiencia.
La intención anunciada por la Federación de Empresarios del Metal de Sevilla (FEDEME), el Consejo Andaluz de Cámaras de Comercio y la Consejería de Innovación Ciencia y Empresa como organizadores de estas jornadas era fomentar unos contactos que para las pymes andaluzas del sector industrial son difíciles de conseguir de manera individual.
Hay que señalar que las grandes tractoras acuden a la cita, aunque sea sin carpeta de trabajo bajo el brazo, al menos con la idea de que simplemente plantar la bandera en el encuentro resulta provechoso, en la medida en que permite estar al tanto de las novedades en el abigarrado tejido del mercado de las subcontratistas.
Muchas veces, el interés está en encontrar proveedores que ayuden a abaratar costes, aunque sea en nichos completamente marginales, ya sea a través del precio o de la calidad, sobre todo en el sector de la automoción.
En otros casos, como pueda ser el de la ferroviaria francesa Alstom, el objetivo estratégico de situarse en Andalucía hace que se busquen los contactos necesarios para trabajos aún por confirmar. Así, las subcontratas se enfrentan al escrutinio triple de la competitividad, la accesibilidad y, en algunos casos, simplemente dejar en la retina de la grande de turno la propia existencia.
La mejora de los canales de información en una industria que cada vez tiende a "atomizar" la producción de piezas previas al ensamble en pequeños subcontrastistas es uno de los objetivos confesos de los encuentros celebrados durante esta "semana de tres días", y en ese sentido casi se puede considerar un éxito, si se atiende a las estadísticas de los organizadores.
Los sectores aeronáutico y de automoción han sido las estrella en cuanto a esperanzas depositas en los contactos establecidos, de los cuales al menos la mitad se espera que den frutos.
