El Parlamento vasco dio el viernes luz verde al proyecto de ley que contempla la consulta que Ibarretxe quiere plantear a la sociedad vasca sobre el futuro de Euskadi. Y lo hizo con una exigua mayoría y gracias al PCTV. Para Ibarretxe, el derecho a decidir "ha venido para quedarse" y no hay "vuelta atrás".
De no ser por los abertzales, la iniciativa no habría salido adelante, puesto que se hubiera registrado un empate a 33 votos entre el tripartito y Aralar, favorables a la consulta, y PSE y PP, que se oponen a ella. El texto contempla la celebración de una consulta popular el 25 de octubre, en la que se trata de recabar la opinión de los ciudadanos vascos sobre el final dialogado del terrorismo y sobre un diálogo entre partidos "sin exclusiones" en torno al derecho a decidir, que desembocaría en un referéndum en 2010.
El debate se desarrolló en similares términos al que tuvo lugar en 2004, cuando el Plan Ibarretxe salió adelante gracias al respaldo de tres de los seis parlamentarios de Sozialista Abertzaleak, el grupo que por aquel entonces representaba a la izquierda abertzale en la Cámara.
En esta ocasión, fue la parlamentaria de EHAK Karmele Berasategi quien aportó su voto a favor para propiciar la aprobación de la iniciativa. Las otras siete representantes de este grupo presentes en el pleno (otra de ellas no asistió al debate) se abstuvieron en la votación.
Al término del debate, los miembros del Gobierno vasco se reunieron en la Cámara para "intercambiar impresiones", tras el visto bueno del Parlamento a la ley, que, según se informó desde la Presidencia del Gobierno autonómico, permitirá "profundizar en la democracia participativa con el fin de buscar la paz y el diálogo político".
Altura de miras. El lehendakari, Juan José Ibarretxe, que fue el encargado de abrir el debate con su defensa del proyecto, pidió "altura de miras" para aprobar la iniciativa "sin dramatismos" y criticó que el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, "amenace" con pararla "a cualquier precio". Además, afirmó que "el derecho a decidir ha venido para quedarse" y no tendrá "vuelta atrás", pese a impedimientos políticos y jurídicos. Asimismo, dijo que, con la consulta, se pretende "poner a ETA en su sitio".
Consideró "delirante" que se califiquen estas iniciativas de "rupturistas, ilegales, revolucionarias y radicales" y destacó que esas ideas no son suyas, sino que es "una recomendación del Comité de Ministros del Consejo de Europa" que cree la consulta como una "fórmula ideal". De la misma forma, Ibarretxe advirtió de que "no divide quien pregunta, sino quien prohíbe consultar", y defendió que "la democracia no consiste en impedir a una sociedad que opine, sino en consultar".
Mientras tanto, la portavoz del PCTV-EHAK en el Parlamento Vasco, Nekane Erauskin, incluyó su intervención en el grupo de los partidos que hablaron en contra de la consulta, pese a que sin su partido no hubiera salido adelante. Por la mañana, durante el debate, confirmó que daría su visto bueno a la consulta, aunque acusó al lehendakari de hacer "trampa" porque "ejercer el derecho a decidir no es realizar una consulta no vinculante".
Así, con un sólo voto pretendían, según dijo Erauskin, "no impedir" que salga adelante el proyecto. "Damos sólo un voto para dejar en evidencia el tope de la Constitución y que Euskal Herria no entra dentro de la Constitución española, que el PNV ha aceptado cien años", manifestó.
