Cada vez son más los jóvenes que la padecen. La impotencia sexual no entiende de edades y es que según el estudio que ha llevado a cabo una marca de productos vigorizadores, el 10% de sus consumidores tienen edades comprendidas entre 18 y 25 años. Algunas de las causas que lo provocan de manera tan precoz son el consumo de alcohol, drogas o las diversas situaciones de estrés que pueda sufrir el afectado, como las de tipo laboral. El alcohol infiere en el buen funcionamiento del sistema nervioso central, entorpeciendo al sistema circulatorio la transmisión de sangre hasta el pene, y dificultando por ende la erección. Además para ellos la impotencia sexual es un tema que suelen tratar con bastantes tapujos y generalmente intentan buscar soluciones consultando en internet o a sus más allegados.