La Policía Nacional ha intervenido siete toneladas de hachís que llegaron a la provincia de Cádiz procedentes de Marruecos a bordo de dos embarcaciones. Los efectivos impidieron la descarga de estas sustancias en los puertos de Cádiz y Sanlúcar en el transcurso de las operaciones Cóndor y Rengue, respectivamente, que permitieron la detención de cinco personas, que ya se encuentran en prisión.
Según el comisario jefe de la Brigada Central de Estupefacientes, Francisco Migueláñez, esta actuación, a cargo de la UDYCO central y la Comisaría de Sanlúcar, ha sido la más importante que ha tenido lugar en Andalucía desde "el punto de vista cuantitativo", por la cantidad de droga incautada, y "cualitativo", por la estrecha vinculación de las personas implicadas con el mundo del narcotráfico.
El primer alijo se frustró el pasado 21 de septiembre en la zona de Puntales, en Cádiz, con la aprehensión de 1.000 kilos y la detención de cuatro personas. Tampoco consiguieron introducir la segunda partida el día 24 a bordo de un pesquero en el puerto de Sanlúcar, donde la Policía se incautó de otras seis toneladas.
Por su parte, la Guardia Civil ha desarticulado una organización dedicada al robo de cobre en parques eólicos, estaciones fotovoltaicas y alumbrado.
