Para poner en marcha un buen proyecto empresarial es necesaria la conjunción de buenas ideas con una buena financiación. Lo uno no prospera sin lo otro. Menos aún en el inicio de cualquier actividad donde todo apoyo es necesario, tanto el económico como el asesoramiento profesional.
Consciente de ello, la Junta de Andalucía ha apoyado a los jóvenes emprendedores y empresarios de la región con un instrumento que se ha mostrado tan eficaz en el tejido empresarial como es Invercaria, la entidad pública de capital riesgo que está participada al cien por cien por la Agencia de Innovación y Desarrollo de la Consejería de Innovación, Ciencia y Empresa.
Desde que se pusiera en marcha en el año 2005, esta entidad presidida por Tomás Pérez-Sauquillo ha favorecido la creación de 2.740 nuevos puestos de trabajo y ha invertido cerca de 55 millones de euros en más de 230 proyectos empresariales andaluces de todos los ámbitos: la cultura, el medio ambiente, las nuevas tecnologías, etcétera.
Así lo reflejan los datos del último balance realizado por la Junta de Andalucía. Pero aún hay más. Invercaria tiene un compromiso de inversión superior a los 63 millones de euros, por lo que numerosas empresas podrán beneficiarse todavía de su importante respaldo financiero.
Y lo podrán hacer bien a través de los fondos propios de esta entidad o bien mediante los distintos programas en los que participa Invercaria, como son el programa Campus, que impulsa a las empresas nacidas de la colaboración con las universidades, los programas Melkart o Atlantis, que apoyan empresas innovadoras de base tecnológica el primero y creativa-cultural el segundo, y el programa Gaya, para empresas culturales y sociales.
El apoyo que presta Invercaria a los emprendedores y empresarios andaluces permite a éstos no sólo poner en marcha su idea empresarial, consolidarse en el mercado o ganar competitividad y calidad sino que, además, dinamiza el empleo facilitando la creación de nuevos puestos de trabajo con incentivos y ayudas. Y todo pese a la crisis económica.
De los casi 2.800 nuevos puestos de trabajo, 2.000 nacen de la colaboración de Invercaria con las empresas a través de sus fondos propios; 190 puestos surgen a raíz del programa Melkart y 70, a través de Gaya.
Por otro lado, el apoyo a empresas innovadoras que participan en el programa Campus ha facilitado la creación de 416 empleos y Atlantis, de casi 80.
La principal. Este elevado número de operaciones convierte a la firma andaluza en una de las sociedades de capital riesgo más importantes y dinámicas del país, después de Enisa (Empresa Nacional de Innovación), dependiente del Ministerio de Industria.
En cuanto a la inversión, del total, más de 35 millones de euros corresponden a la participación de Invercaria en las empresas a través sus fondos, en 51 iniciativas empresariales.
Además, la empresa pública, destinó más de 12 millones de euros al programa Campus, un instrumento financiero dedicado, principalmente, a investigadores que desarrollan proyectos de generación de nuevo conocimiento, sea científico o tecnológico.
En este programa ya son cien las firmas participadas por Invercaria. Para acceder a este apoyo han de cumplirse varios requisitos, como que los trabajos deben derivar en una idea innovadora que tenga posibilidades de aplicación empresarial.
Las iniciativas de empresas de base tecnológica recibieron por su parte cerca de cuatro millones de euros a través del programa Atlantis y las de base creativa-cultural, algo más de dos millones para 45 proyectos gracias al programa Melkart.
Préstamos. El Melkart es una línea de préstamos participativos diseñada, especialmente, para empresas innovadoras basadas en el conocimiento.
Se trata, en definitiva, de un apoyo financiero a bajo interés, con condiciones de devolución que se ajustan al crecimiento de la firma beneficiaria. Su misión principal es estimular el aprendizaje y contribuir a la riqueza social y económica de Andalucía.
También los Gaya ocupan una parte esencial en la participación de Invercaria. Más de un millón de euros han sido destinados a doce pequeñas empresas de base social. Gaya es una línea de financiación a través de capital semilla diseñada, específicamente, para emprendedores sociales que poseen la visión, creatividad y determinación que se asocian, tradicionalmente, a los empresarios, pero que además están comprometidos con la sociedad y desean colaborar en su desarrollo sin ningún ánimo de lucro.
