Tratan de aclarar qué pudo pasar. La compañía Gas Natural inspecciona la vivienda siniestrada la tarde del pasado jueves en el barrio de El Valle, en el Edificio Ermita, donde resultaron heridas de diversa consideración siete personas en un incendio cuando se manipulaba una instalación de gas.
La compañía Gas Natural ha inspeccionado el piso en el que el jueves se registró una deflagración mientras cuatro de sus operarios purgaban los conductos de la red de suministro. Empleados de la gasística han estado recabando datos para esclarecer las causas de esta explosión que se saldó con siete heridos incluyendo la propietaria de la vivienda y sus dos hijos, una joven de 17 años y un niño de 9.
El sargento del parque de bomberos de Écija, Adolfo Simino, ha informado que después de que sus efectivos consumaran la extinción del incendio declarado en torno a las 15.30 horas en este piso, un nuevo equipo de técnicos de Gas Natural se personó en la vivienda afectada, tomando fotografías y examinando la red de conductos de la que partió el estallido.
Mientras tres de los operarios heridos en la deflagración eran evacuados ayer a la Unidad de Quemados del hospital Virgen del Rocío, en Sevilla, la dueña de la vivienda y sus dos hijos menores de edad fueron dados de alta en el hospital astigitano de San Sebastián, si bien anoche pernoctaron en el hogar de "unos familiares" a la espera de que la compañía aseguradora de su domicilio se encargue de contratar la reposición de la puerta de la casa, afectada por la explosión.
Esta familia fue la única que pasó la noche del jueves fuera de su hogar. El resto de inquilinos pudo pasar la noche con normalidad después de que los bomberos descartasen que la deflagración, que ha dañado la cocina y el baño de la vivienda haya puesto en peligro la estabilidad del edificio.
