IU ha tratado de mantenerse al margen de la polémica sobre las catenarias y el futuro del Metrocentro. En este tema ha cedido el protagonismo a su socio de Gobierno y ha evitado entrar en confrontaciones. Ayer, su portavoz en el grupo municipal, Antonio Rodrigo Torrijos, aludió a la confusión generada en los últimos días sobre la adjudicación de las unidades móviles y sobre las empresas que deben gestionar este proyecto. "Creo que en un tema de esta envergadura para la ciudad, se debe hablar siempre con seriedad, solidez, rigor y verosimilitud. Que las cosas que se digan no se tengan que corregir", apuntó el también primer teniente de alcalde del Ayuntamiento de Sevilla.
Las palabras de Torrijos se producen pocos días después de que el alcalde y el equipo de Gobierno hayan tenido que dar marcha atrás en su promesa de retirar las catenarias del tramo de la Avenida de la Constitución situado frente a la Catedral tras la Semana Santa de 2009. El regidor también se ha visto embarcado en una sucesión de declaraciones sobre la adjudicación de este proyecto a la empresa CAF-Santana. Hay informes y opiniones que apuntan a un cambio de sociedad y otros que avalan el mantenimiento del trabajo con esta compañía.
El equipo de Gobierno, además, ha tenido que improvisar una salida provisional al problema con su modelo de sustitución de las catenarias por farolas fernandinas. El portavoz de IU eludió posicionarse claramente sobre todas estas circunstancias y a expresar su opinión sobre los sistemas que deben ponerse en marcha en el Metrocentro.
Sí subrayó que el tranvía debe llegar a San Bernardo y de ahí a Santa Junta en una ampliación "sin solución de continuidad".
