Jaime Rodríguez Sacristán debutó el sábado como presidente del Betis y por tanto ha entrado en la historia del club de las trece barras. Los indicios, sobre todo los judiciales, apuntan a que su mandato será más breve que extenso, pero cuando abandone el cargo nadie le podrá negar ya que ha sido presidente. Y además será un dirigente redondo en la centenaria vida de la entidad de Heliópolis, porque la suya será la legislatura número 40 del Real Betis Balompié (presidentes ha habido menos, 37 antes que él, pero uno, José León, lo fue tres veces, de ahí el descuadre).
El nuevo presidente del Betis, hijo del prestigioso psiquiatra malagueño Jaime Rodríguez Sacristán, se crio junto al campo del Betis por el lado del Gol Norte y vive junto al campo del Betis por el lado del Gol Sur. Desde pequeño soñó con ser presidente y lo ha conseguido a una edad temprana para lo que suele ser habitual entre los dirigentes del fútbol español, con 45 años (cumple 46 el lunes de la próxima semana). También fue uno de los directivos más jóvenes de la historia del Betis: cuando entró en el club tenía 34 años. Llegó Rodríguez Sacristán junto al otro abogado del club, Manuel Castaño, en 1999, cuando Enrique Cabezas agotó su ciclo.
Rodríguez Sacristán, con carnet de socio por debajo del número 600 y fundador y miembro activo de la peña bética Los del Paraguay, es uno de los presidentes más jóvenes de la historia del club, pero los hubo más precoces, por supuesto. Pedro Rodríguez de la Borbolla, último presidente del Betis FC y segundo del Real Betis Balompié, nació un 11 de junio (día importante muchos años después, cuando el equipo ganó su segunda Copa del Rey en 2005) de 1881 y accedió al cargo en 1915, así que apenas tenía 34 años cuando sucedió al mítico Herbert Richard Papá Jones. Durante su estancia en la presidencia, el Betis adquirió el título de Real gracias al rey Alfonso XIII.
También era muy joven otro mito verdiblanco, Ignacio Sánchez Mejías, cuando cambió el traje de luces por el sillón presidencial del Betis. El cuñado de Joselito El Gallo nació en 1891 y sólo contaba 39 años cuando se convirtió en presidente, en 1930. Hasta el presidente más recordado de la historia del club, Benito Villamarín Prieto, era casi un chaval cuando tomó posesión de su cargo. El industrial orensano, nacido en 1917, fue presidente con 38 años de edad. Es más, el predecesor de Rodríguez Sacristán, José León, inauguró el primero de sus tres mandatos, en 1969, con sólo 34 años.
