El gallego Javier Gómez Noya se proclamó ayer en Vancouver (Canadá) campeón del mundo, con lo que tras hacerse con la Copa del Mundo tan sólo le falta el oro olímpico.
Gómez Noya, de 25 años, logró una victoria clara, incontestable, dominó casi a su antojo la prueba sin dar opción a sus rivales, ya que impidió la escapada de sus rivales en los 40 kilómetros del segmento ciclista.
En los 1.500 metros de natación, en la Bahía Inglesa, con traje de neopreno, Gómez Noya salió del agua en sexta posición a diez segundos del canadiense Simon Whitfield, campeón olímpico en Sydney 2000 y muy motivado por correr en casa.
Los otros dos españoles en competición, el coruñés Iván Raña y el madrileño Ramón Ejeda, tampoco salían especialmente alejados: Raña marchaba a 21 segundos del líder y Ejeda a 27 segundos.
En el segmento de ciclismo se formó un pelotón de 50 unidades. El gran grupo apenas permitió una mínima fuga del veterano australiano Greg Bennett, que lo intentó a falta de 10 kilómetros para la segunda transición, pero los favoritos reaccionaron rápidamente y la escapada apenas duró un par de kilómetros.
Con todo por decidirse se llegó a los 10.000 metros de carrera a pie, donde Gómez Noya fue el absoluto dominador. El español acabó por reventar a todos a falta de 4 kilómetros para la meta.
En la prueba femenina, la británica Helen Tucker se tomó la revancha y se proclamó por primera vez campeona mundial, mientras que la gran favorita, la portuguesa Vanessa Fernandes, acusó el frío y la lluvia y tan sólo pudo ser décima después de haber batido el récord de victorias (20) en toda la historia de la Copa del Mundo.
La sevillana María Pujol fue la única de las españolas que terminó la competición, en la plaza 49, mientras que abandonaron Pilar Hidalgo, Marina Damlaimcourt, Zuriñe Rodríguez y Eva Ledesma.
