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José Antonio Navarro Arteaga: 'Es un orgullo esculpir para la capital del arte'

El imaginero José Antonio Navarro Arteaga trabaja en su taller de Sevilla en una réplica de la Virgen de Valme, alcaldesa perpetua de Dos Hermanas, que irá en una parroquia de Roma. Se muestra satisfecho con cómo le está quedando.

el 16 sep 2009 / 05:34 h.

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P. C.

El imaginero José Antonio Navarro Arteaga trabaja en su taller de Sevilla en una réplica de la Virgen de Valme, alcaldesa perpetua de Dos Hermanas, que irá en una parroquia de Roma.

-¿Cómo está quedando la talla?

-Está muy avanzada. Lo que que queda es pasar el modelo de barro a madera. Pienso que a finales de septiembre estará terminada. Luego habrá que pintarla y estará lista para viajar a Roma.

-¿Irá usted también a Roma?

-Claro. Cualquier motivo es bueno para ir a Roma, que es la cuna del arte, y más con este evento. Para mí es un orgullo que una obra mía se exponga en una iglesia de la capital del cristianismo y del arte en general.

-¿Es entonces devoto de la Virgen de Valme?

-No soy de Dos Hermanas, pero conozco todas las devociones marianas de la provincia porque me gusta y es esencial para mi trabajo. Claro que conozco la historia de la Virgen de Valme por su importancia para la provincia y por ser una de las más famosas.

-¿Cómo describe la imagen?

-La Virgen de Valme tiene un estilo gótico, salvo la cara, que parece más barroca. La cara es de una mujer muy bonita, sin arrugas, y eso en la imaginería es más típico del barroco.

-¿Por qué cree que se da esta circunstancia?

-Creo que le pasó lo que a muchas tallas antiguas, que con el paso de los años se fueron remodelando y restaurando, y se introducían los estilos de la época. Es posible que eso sea lo que le haya pasado a la cara de la talla.

-La réplica que está haciendo es más grande que la original, ¿a qué se debe?

-Es casi la misma que está en la parroquia de Santa María Magdalena, pero más grande. La razón es muy sencilla: la bóveda de la parroquia de Roma es enorme, y la imagen se quiere instalar en el altar mayor, por lo que se debe hacer más grande para que todo el mundo pueda verla.

-¿Le está resultando complicado hacer la réplica?

-El problema que tiene es que, al ser una copia, tiene que quedar exactamente igual, por lo que tienes que ser muy cauteloso y se tarda un poquito más de lo normal. Como es una imagen de talla única, que no va por piezas, las estofadas tienen que hacerse de una vez.

-¿Por qué cree que le llegó este encargo?

-Es la recompensa al trabajo y la profesionalidad de toda una vida dedicada a esto. Me enorgullece que la vaya a ver la gente en Italia.

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