José Tomás llevaba sin enfundarse el traje de luces desde la trágica cogida que sufrió el 24 de abril de 2010 en el ruedo mexicano de Aguascalientes . Aquel toro azteca le rompió la femoral y estuvo a punto de segar la vida del diestro madrileño, que tuvo que afrontar posteriormente un largo y complejo proceso de recuperación que, a pesar de las complicaciones que fueron surgiendo, ha tenido un final feliz. En este año largo, los rumores sobre su vuelta no han cesado, incluso cuestionando si el torero podría volver a vestirse de luces. Mientras, Tomás apuraba los entrenamientos en su cuartel general de Estepona aplazando una noticia que, tal y como señaló ayer el apoderado del matador, sólo ha estado condicionada a su definitiva recuperación.
Según declaro ayer el propio Boix, el torero "ha matado toros en las últimas semanas y ya está entrenando con normalidad para su vuelta". El mentor del diestro madrileño también precisó que Tomás afrontará una corta campaña de reencuentro en la que no pasará "de 12 o 14 festejos". Boix también quiso dejar claro que aún no se ha empezado a hablar con el resto de las empresas dejando en el terreno de las probabilidades la presencia del diestro en el último festejo que, previsiblemente, acogerá la Monumental de Barcelona a finales de septiembre antes de su clausura como coso taurino en función de la ILP aprobada el 28 de julio de 2010 en el parlament de Cataluña. A pesar de todo, en los entrebastidores del mundillo taurino se da por hecha esta presencia en Barcelona -de indiscutible valor simbólico y reivindicativo- y se especula con su comparecencia en plazas como las de Valladolid, Linares, Bayona, Nimes o Almería. La vuelta de José Tomás se produce en un momento de fuerte recesión económica que también ha afectado al planeta de los toros. Esta crisis ha sido palpable en la Feria de Sevilla , con numerosos abonos sin renovar y un inédito y sorprendente bajón de público en fechas que antes no fallaban.
En esta tesitura, la reaparición del madrileño se espera como un auténtico maná que tire de los contados abonos en los que ha anunciado su presencia y revalorice la dimensión mediática del toreo. En cualquier caso, también surgen algunas dudas: ¿asumirá carteles y compañeros de primera línea? ¿buscará teloneros que no le hagan sombra? Son las inevitables especulaciones que acompañan a una noticia que ha reventado la actualidad taurina.
