La decisión del fiscal general del Estado, Cándido Conde-Pumpido, de reforzar el papel del fiscal en la investigación de procedimientos penales, provocó ayer la respuesta airada de los jueces de instrucción de la Audiencia Nacional, que consideraron que está propiciando "investigaciones paralelas".
A través de dos disposiciones dictadas este mes de marzo, la Fiscalía General del Estado ordena a los fiscales que intervengan de forma activa en la instrucción de los procedimientos penales, y les recuerda que pueden ordenar investigaciones a la Policía Judicial, aunque exista un proceso judicial en curso.
En la segunda directiva, Conde-Pumpido recuerda a los fiscales que "no deben delegar" en el juez la responsabilidad de realizar una investigación correcta y eficaz, y afirma que "es el fiscal quien está en mejor posición para orientar esa investigación".
Este criterio provocó la reacción crítica por parte de los jueces de instrucción de la Audiencia Nacional, que consideraron que esto podría propiciar investigaciones paralelas "sin control judicial y con riesgo grave de solapamiento" de la investigación que dirige el juez instructor.
La Junta de Jueces del tribunal, que se reunió para analizar la orden de la Fiscalía, comunicó a la Sala de Gobierno de la Audiencia Nacional, al Consejo General del Poder Judicial y a las Juntas de Jueces de toda España, además de al Ministerio Público, que rechazará cualquier diligencia practicada por el fiscal que no haya sido solicitada por el juez.
Tras esta decisión, la Fiscalía aclaró que no se trata de llevar a cabo investigaciones paralelas, prohibidas por ley, sino de ordenar a la Policía si fuera necesario "actuaciones para facilitar y agilizar la tarea instructora".
