En el fútbol hay veces en las que jugando bien se pierde y hay otras en las que hasta jugando mal se gana. Son cosas de este deporte. Lo que sí tiene importancia en un equipo es tener jugadores que, en momentos decisivos, tengan la capacidad de sacar un partido adelante con su fútbol y sus goles decisivos. No tengo la menor duda de que en el partido de Los Pajaritos ante el Numancia, el Betis tuvo en Mehmet Aurelio al futbolista que, con sus goles, decidió la victoria.
Candidato a bajar. El Numancia es un claro candidato a estar peleando hasta el final para evitar el descenso. Y el Betis o se ha visto tan superior en el papel o ha descuidado tanto el juego en los momentos fundamentales que ha tenido que sacar el partido en jugadas puntuales. El equipo verdiblanco logró su objetivo sólo con el apoyo del conjunto de su fútbol, que tuvo desde momentos puntuales buenos hasta otros en los que el equipo anduvo desorientado y perdido, y en los que sólo le salvó la enorme debilidad del equipo de Sergio Kresic. En un error del portero Casto se adelantó Del Pino, uno de los mejores del conjunto rojillo. El dominio era infructuoso y sólo en dos golpes en el tiempo de descuento Juanito, primero, y Mehmet Aurelio, después y en colaboración de un jugador del Numancia, pusieron un 1-3 en el marcador que se pensó que sería definitivo.
No mató y lo pasó mal. Anduvo el Betis tonteando con un fútbol sin sentido en el primer cuarto de hora del segundo tiempo y dio pie a que el Numancia apretara el marcador con el 2-3 aunque, afortunadamente para el Betis, el equipo de Soria no está para grandes hazañas. Tuvo que ser de nuevo un genial Mehmet Aurelio el que, en un magnífico disparo, colocara el balón en la escuadra y el definitivo 2-4 en el marcador.
