Mariano Bellver posa frente a uno de sus cuadros en una imagen de archivo tomada en su domicilio.
Ni la Consejería de Cultura ni el Ayuntamiento hicieron ayer la más mínima autocrítica tras conocer que Mariano Bellver ha rechazado donar su valiosa colección de pintura y escultura del siglo XIX al Museo de Bellas Artes y que va a resolver la cesión de sus cuadros a la ciudad a través de una entidad ajena a estas dos administraciones que, a su juicio, han sido incapaces de resolver un ofrecimiento que está sobre la mesa desde 1998.Desde el Consistorio indicaron a El Correo que lamentan "que Bellver se haya tenido que ir a hablar con Cajasol, porque ni la Junta de Andalucía ni el Ministerio de Cultura acometen la ampliación del Bellas Artes".
"Desde el Ayuntamiento seguiremos apoyando a Bellver y trabajando para que la pinacoteca se pueda ampliar", añadieron. Sin embargo, no quisieron responder a las críticas del coleccionista, que este lunes dijo a El Correo que el PP le prometió resolver el asunto cuando estaba en la oposición y que, tras llegar al Gobierno local, se limitó a decirle que no disponía de espacios.Por su parte, el delegado provincial de Cultura, Bernardo Bueno, indicó a este periódico que la consejería "siempre ha perseguido que la colección Bellver se quede en Sevilla" y se congratuló de que finalmente vaya a ser así, según se deduce de las palabras del mecenas, quien avanzó a este periódico que en 2012 estará resuelta la donación.
"No considero que hayamos fracasado, siempre le hemos ofrecido lo mejor que hemos tenido: el Palacio de Monsalves, cuando el Bellas Artes esté ampliado y la Sala Santa Inés mientras se llevan a cabo estas obras", dijo Bueno, que agregó que "él es el dueño de su colección y si llega a un acuerdo con Cajasol, tendrá un gran espacio en la calle Sierpes".Sobre las críticas del Ayuntamiento, dijo que "es un sarcasmo y de mucha cara dura que quienes no ofrecen nada encima critiquen".