Los jueces del Tribunal Penal Internacional para la Antigua Yugoslavia (TPIY) aplazaron ayer una jornada el juicio contra e ex líder serbobosnio Radovan Karadzic, al que invitaron a que antes de que ellos tomen medidas, reconsidere su postura y comparezca hoy en la sala.
El TPIY, que planea cerrar sus puertas en 2013, quiere evitar que el juicio a Karadzic se convierta en un macroproceso como el de Milosevic, que duró cuatro años y no se concluyó a causa de la repentina muerte del ex presidente yugoslavo debido a un infarto.
El TPIY inició ayer el juicio contra el ex líder político de los serbios de Bosnia, pero la vista duró apenas media hora porque el acusado, como anunció en una carta la semana pasada, no se presentó ante los jueces. Los magistrados advirtieron ayer a Karadzic -que reclama más tiempo para preparar su defensa- de que el juicio podría continuar a pesar de su negativa a presentarse. Pese a esto, uno de los consejeros legales de Karadzic aseguró que éste tampoco se presentará hoy martes ante el tribunal.
El juez que preside el caso, O-Gon Kwon, recordó que "existen medidas que se pueden aplicar si el acusado sigue obstaculizando el proceso". El magistrado precisó que "en determinadas circunstancias" el juicio puede celebrarse en ausencia del acusado, al que también se le puede asignar un abogado defensor incluso en contra de su voluntad.
Karadzic afirmó en una carta publicada ayer por el TPIY, pero fechada el pasado sábado, que "nunca boicotearía" su juicio, pero que si no está preparado "no sería un juicio en absoluto", por lo que reclamó una "solución justa". Después de 15 meses de preparación, Karadzic exige unos 10 meses más para poder defenderse a sí mismo en el tribunal que lo juzga por 11 cargos de crímenes de guerra y lesa humanidad presuntamente cometidos durante la guerra de Bosnia, así como por genocidio.
Tiempo suficiente. Los jueces recordaron que Karadzic tuvo tiempo y recursos suficientes para prepararse, como lo demuestra que en la fase preparatoria a su juicio haya producido unas 250 mociones. El ex líder serbobosnio, al que se le rechazaron dos apelaciones para posponer la fecha de inicio del juicio, se defiende a sí mismo pero cuenta con un grupo de asesores que lo asisten en la preparación de documentos.
