La plataforma Por Nuestro Betis (PNB), una de las más activas de la oposición, celebró ayer en Los Monos-Juliá una Asamblea General Extraordinaria de asociados y sindicados en la que su presidente, el economista José Antonio Tirado, se iba a someter a una moción de confianza.
11 de los 13 integrantes de la junta directiva del colectivo habían exigido la dimisión de Tirado por sus reuniones con consejeros del Betis y otros miembros de la oposición el pasado verano.
El acto, que se prolongó durante más de tres horas y en el que se produjeron algunos momentos de tensión por el cruce de acusaciones entre compromisarios, finalmente no arrojó ninguna decisión, ya que no se procedió a la votación definitiva al no existir consenso sobre el modo de hacerlo -a mano alzada o secreto-.
En la cita, a la que asistieron unos 200 afiliados y socios de la plataforma y en la que hubo más de 30 turnos de palabra -incluidas las intervenciones de Alfonso Jaramillo o Adolfo Cuéllar, entre otros-, también se detalló el calendario que se cumplirá antes de la celebración el 14 de diciembre de la Asamblea General Extraordinaria.
Por la mañana, y antes de desvelarse el resultado de la moción, Rafael Gordillo, interventor de los derechos políticos de las acciones de Farusa, comentó que, a su juicio, un cambio en PNB "no sería bueno, pues queda poco tiempo para la decisiva Junta".
