La Audiencia de Sevilla ha permitido que siga en libertad vigilada un menor para el que la Fiscalía pidió el internamiento en un centro de reforma por ser reincidente en dos palizas propinadas a otros jóvenes en el plazo de dos semanas.
Este chico está imputado en una paliza a dos jóvenes, utilizando botellas, en una pelea en la zona de Viapol el 29 de septiembre de 2007, y en otra agresión a botellazos y patadas a un joven el 12 de octubre de 2007 en la plaza de España -hecho por el que hay otro menor internado en un centro de reforma-.
La Sección Tercera afirma en un auto que "no cabe duda de que la gravedad de los hechos" hubiera requerido un internamiento en régimen cerrado, pero permite que el chico continúe en libertad porque "tiene una familia estructurada y estudia Segundo de Bachillerato con expectativas de continuidad". La situación personal y social del menor y la buena evolución certificada por el Equipo Técnico hacen pensar que un internamiento sería "una regresión".
No obstante, añade que la medida de libertad vigilada "es necesaria para contener al menor, para que le sirva de reflexión, para normalizar su relación con la sociedad y con el medio en el que vive y para la adquisición de valores como la tolerancia frente al uso de la violencia".
