La desaceleración de la economía ya se está haciendo presente en los consistorios del área metropolitana, los más perjudicados por la caída de la construcción. El parón del ladrillo está provocando una bajada en los presupuestos municipales, que ven mermados sus ingresos por urbanismo.
De los 46 municipios del área metropolitana, hay 20 que tienen incluso los presupuestos municipales prorrogados, es decir, con la misma previsión de ingresos de 2007, y pese a que por ley están obligados a aprobarlos antes del comienzo de cada ejercicio. Otros seis son más reducidos que en 2007, mientras que el resto se estabilizan o crecen, pero muy poco, y claramente distanciados de los incrementos experimentados entre los ejercicios de 2005 y 2007 cuando, con la cercanía de las elecciones municipales suelen darse importantes subidas.
En los pueblos del Aljarafe, por su gran desarrollo inmobiliario hasta el momento, se está haciendo notar de forma más clara. En el caso de Tomares y Espartinas, el presupuesto municipal de 2008 es seis millones de euros menor que el del año pasado. Mientras, en Umbrete, Gelves, Gines e Isla Mayor, también con claras bajadas, éstas son por un margen más estrecho.
Según los cálculos de la Federación Andaluza de Municipios y Provincia (FAMP) los ingresos por la construcción han bajado un 50% de media en las administraciones municipales, de manera que las cuentas tienen que ser mucho más modestas que en años anteriores. Por ello urge la reforma de la financiación de la hacienda local con el fin de aumentar la Participación en los Ingresos del Estado (PIE) de los municipios, donde el incremento de las competencias que asumen no se ha visto compensado con una subida de las transferencias.
Situación. El alcalde del mayor municipio de la corona, Dos Hermanas, Francisco Toscano (PSOE), que también preside la FAMP, es claro al respecto: los municipios deben comenzar a decidir en cuestiones tan importantes como las inversiones de la Junta de Andalucía en materias como la educación y la salud. No se trata, pues, de quitar determinadas competencias a los consistorios, sino de dotarlos para ello, mientras que piensa que otras atribuciones que sí tienen ahora mismo las administraciones locales tal vez no sea tan necesario que las ostenten.
Sobre el caso de su municipio, reconoce: "Estamos preparados para la situación que se avecina, entre otras cosas porque en los últimos años hemos optado por unos presupuestos municipales continuistas, incluso con pequeñas reducciones con respecto a los ejercicios anteriores, para no engordarlos artificialmente y tener problemas con la situación actual", expresa.
Por otra parte desde el Ayuntamiento de Tomares apuntan que la reducción del presupuesto municipal en casi seis millones de euros, respecto al anterior presentado que se remonta a 2006, responde a una "asimilación de la realidad económica del municipio para evitar hacer previsiones erróneas que después conlleven una situación de crisis". De igual manera, fuentes municipales subrayan que la intención del equipo de gobierno (PP-PA) con la reducción de los presupuestos municipales es "contribuir a la estabilización de la economía local, y además romper con la tendencia anterior a realizar unas cuentas infladas que se alejaban de la realidad".
