Economía

La banca pagará sus pérdidas sin afectar al ciudadano ni al déficit

El Gobierno crea un solo fondo de garantía de depósitos con el que los bancos sufragarán también el rescate de las cajas.

el 06 oct 2011 / 19:56 h.

El Gobierno ha unificado los tres fondos de garantía de depósitos existentes -de bancos, cajas de ahorros y cooperativas de crédito- en uno solo para que absorba las eventuales pérdidas futuras del sector financiero, anunció ayer la ministra de Economía y Hacienda, Elena Salgado.

La intención del Gobierno es que, una vez acometida la recapitalización del sector financiero, "las posibles pérdidas futuras que pudieran aparecer en el proceso de reestructuración ni se trasladen al contribuyente ni aumenten el déficit", sostuvo.

A partir de ahora, este único Fondo de Garantía de Depósitos (FGD), que se nutrirá de las aportaciones de las entidades financieras, va a proveer al Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (FROB) ante las pérdidas potenciales que puedan surgir en el proceso de reajuste.

Salgado incidió en que, de esta forma, el sector financiero "asume en su totalidad los costes de saneamiento y reestructuración", una tarea para la que cuenta con 6.600 millones a día de hoy, que se alimentará con aportaciones de 850 millones anuales.

La ministra especificó que el FGD compatibilizará esta función con la de garantizar los ahorros de los españoles hasta un máximo de 100.000 euros por depositante y entidad financiera. El nuevo cometido del fondo, que quedará establecido en un decreto ley y que se convalidará en el Congreso de los Diputados, "para nada modifica esa garantía", incidió la vicepresidenta.

La oportunidad de la medida se justifica porque el Gobierno percibe la posibilidad de que la reestructuración genere pérdidas tras la intervención de la Caja de Ahorros del Mediterráneo (CAM), lo que podría tener efectos sobre el déficit público.

Salgado recordó que el gobernador del Banco de España, Miguel Ángel Fernández Ordóñez, reconoció el pasado viernes que la inyección de 2.800 millones en la alicantina para reforzar su solvencia podría no recuperarse, por lo que se crea "antes de que se venda la CAM".

No obstante, eludió cuantificar el eventual impacto de la reestructuración en el déficit. "No es cuestión de cuánto, sino que el Gobierno entiende que la reestructuración debe ser financiada por el sector financiero".

"Si en la CAM hay pérdidas, se sabrá en el proceso de venta", especificó la ministra, tras insistir en que el objetivo es que la operación se haga con las menores pérdidas posibles. Respecto a si la medida obliga a los bancos a pagar la reestructuración de las cajas, Salgado arguyó que "no hay que tener una idea tan patrimonialista de los fondos porque no son de los bancos, tienen personalidad jurídica propia y no están en sus balances".

Asimismo, agregó que la reforma financiera beneficia al conjunto del sector y consideró razonable que se proceda de esta manera, porque las cajas que han recibido inyecciones de dinero público a través del FROB lo han hecho tras constituirse en bancos.

"El 98% de los activos y pasivos financieros se gestionan en bancos", incidió Salgado, si bien agregó que la opinión de la Asociación Española de Banca (AEB) "será muy respetable".

Salgado valoró el impacto de la reestructuración sobre las cuentas públicas y afirmó que no se opone a la recapitalización propuesta por el FROB, que ha destinado 7.551 millones a recapitalizar cajas de ahorros.

IRRESPONSABILIDAD. La vicepresidenta aseguró que el gobernador del Banco de España "ha hecho bien" su tarea de supervisión del sector financiero español, por lo que tachó de irresponsables las críticas del PP. "Por supuesto que lo ha hecho bien", aseveró, y lamentó las críticas del PP.

"Resultan ciertamente sorprendentes las declaraciones de quien considera que tiene posibilidades de formar Gobierno. Me parece una cierta irresponsabilidad poner en cuestión al supervisor". Respecto al debate sobre las indemnizaciones millonarias de directivos de cajas que han recibido dinero público, Salgado agregó que la tutela de las cajas corresponde a las comunidades autónomas hasta que se convierten en bancos.

  • 1