La continuidad de la Bienal Internacional de Arte Contemporáneo está en el aire a causa de la deuda que ésta arrastra desde su primera edición y de la crisis económica actual, que ha restado apoyos privados y va a recortar además las ayudas públicas. Sin embargo, la Biacs parece haber encontrado su tabla de salvación: un "superpatrocinador" francés con el que se negocia un acuerdo.
La tercera edición de la Bienal Internacional de Arte Contemporáneo de Sevilla se cerró a principios de este año con un balance preocupante: había costado tres millones de euros -puestos casi al 50% por el sector público y privado- y sólo se habían ingresado 100.000 euros por taquilla. Esto llevó a sus responsables a invitar a las administraciones a participar más activamente en la siguiente edición, prevista entonces para 2010, y a avanzar que el certamen se ajustaría el cinturón debido al difícil momento económico. Sin embargo, la situación era más grave de lo que se pensaba. El gasto en la Biacs3 fue mucho más alto de lo presupuestado inicialmente ya que, a pesar de los controles, los comisarios expusieron más instalaciones inter-activas -caras de mantener- de las previstas y un patrocinador se cayó en el último momento, según reconoció ayer a El Correo el presidente de la Fundación Biacs, Fernando Franco.
Esta situación generó deudas económicas que han llegado a hacer dudar a las administraciones colaboradoras de que finalmente pudiera llegar a celebrarse una cuarta Bienal. "Mi impresión es que no creo que tenga lugar en el Centro Andaluz de Arte Contemporáneo una Biacs en 2011", comentaba ayer a este periódico el aún director del CAAC, José Lebrero, al ser preguntado por el futuro de este evento.
Sin embargo, la Fundación Biacs, con Fernando Franco a la cabeza, lleva tiempo buscando posibles patrocinadores para evitar que Sevilla pierda este proyecto que nació en 2004 y situó a la capital hispalense en el mapa internacional del arte contemporáneo. Y parece que la búsqueda ha llegado a su fin. Ayer mismo Franco y el gerente de la Bienal, Luis Olivar, se encontraban en París negociando un acuerdo con un "superesponsor extranjero" que estaría dispuesto a embarcarse en esta iniciativa.
"El acuerdo se va a alcanzar con toda seguridad. Tenemos un documento prefirmado y falta un último convenio que se suscribirá en noviembre", anunciaba un feliz Fernando Franco, quien añadía que la captación de estos fondos "resolvería las deudas de la Biacs, dejando su situación financiera prácticamente limpia", al margen de una parte de los préstamos a largo plazo que se firmaron para pagar el déficit de la primera edición.
De hecho, el presidente de la Fundación Biacs señaló que ya se están manteniendo conversaciones con posibles candidatos a ser el próximo comisario y que se está trabajando en definir la temática, aunque eludió dar más datos.
Además, está estudiando cómo reforzar el control del gasto para evitar desmanes, sobre todo teniendo en cuenta que, aunque se capten nuevos mecenas, las instituciones "no sólo tienen difícil incrementar su aportación, sino que les costará mantener la que hicieron en la anterior Bienal".
De no haber conseguido -o de no lograrse finalmente- este patrocinio francés, Fernando Franco asegura que se habría intentado organizar "algo diferente", aunque en una escala menor a la Bienal, ya que "el proyecto es interesante para la ciudad". No obstante, parece que las negociaciones llegarán a buen puerto, asume.
De ser así, la Biacs4 se celebrará, si bien todavía no está cerrado dónde y cuándo. "Espero que podamos contar con el CAAC. Hablé hace días con el director general de Museos de la Junta, Pablo Suárez, y estaban a la espera de que se resolviera la situación financiera, pero el proyecto sigue adelante", dijo al respecto.
