Una mujer trabajando en el campo.
La crisis no solo ha supuesto un retroceso en los derechos adquiridos de los trabajadores, sino que se ceba especialmente con el colectivo de mujeres. En 2013, el 95 por ciento de los 17.000 nuevos parados en la provincia de Sevilla, según la EPA, fueron mujeres. Y las que trabajan mantienen una brecha salarial del 37,7 por ciento respecto a sus compañeros masculinos, según un informe elaborado por CCOO Sevilla con datos de 2012, los últimos disponibles. Ellas cobraron así 13.189 euros, 4.971 euros menos que ellos (18.160). Gran parte de culpa de esta diferencia, señala el estudio, se explica además de por la menor ocupación de puestos directivos, en la tipología de contrato, con más incidencia de la jornada parcial que en el caso de los hombres.
Teresa García, secretaria de Empleo del sindicato, incide en que esta diferencia en las retribuciones está muy relacionada con los sectores que más mujeres emplean y en los que los sueldos son más bajos. Es el caso, reseña, de la agricultura y del comercio. Tan es así, que el empleo agrario femenino es el que acusa la mayor discriminación, con una brecha del 125 por ciento (2.343 euros frente a 5.272), seguido de la industria, donde la distancia es del 63,8 por ciento (12.894 euros respecto de 21.125) y del comercio, con una variación salarial del 62,3 por ciento (traducida en euros: 10.596 euros para ellas, 17.198 euros para ellos). Valga como ejemplo, apunta García, que el año pasado el 22,6 por ciento de los contratos firmados por mujeres fueron de peón agrícola y el 10,7 por ciento, de camareras.
Ningún sector escapa a esta realidad, si bien es construcción y actividades inmobiliarias en el que es menos perceptible, con una diferencia retributiva del 3,3 por ciento.
Con esa tasa del 37,7 por ciento, la provincia se sitúa así por encima de la media regional (34,5 por ciento) y nacional (31,5 por ciento), de manera que en España una mujer tiene que trabajar 53 días más para cobrar lo mismo que un hombre. El análisis por comunidades arroja que la menor brecha se registró en Canarias (20,7 por ciento) y el techo se tocó en Asturias (39,2).
Según los datos de CCOO, en 2012 la retribución media de las asalariadas andaluzas se situó en los 12.391 euros anuales, mientras que la de los hombres escaló hasta los 16.670, con una diferencia por género de 4.279 euros. Aunque sigue existiendo una gran brecha, lo cierto es que ésta se ha ido reduciendo en la última década, desde el 53,6 por ciento del año 2002. Aun así, el análisis pone de relieve que el recorte más significativo de esta desigualdad se concentró entre 2007 y 2009, en cuyo periodo se redujo del 50,1 al 37,7 por ciento. Sin embargo, las andaluzas, al tener la segunda renta salarial más baja (por delante solo Extremadura) con el 78 por ciento de lo que perciben de media las españolas lejos del 128,6 por ciento de las madrileñas, la brecha salarial no hace sino acentuar la desigualdad en la región.
Dentro de la comunidad, existe otra fractura, entre provincias. Huelva se lleva la palma en desequilibrio salarial, con diferencias retributivas del 51 por ciento, seguida de Cádiz (45 por ciento) y Sevilla, mientras que Almería, con un 21,4 por ciento, se sitúa en el extremo opuesto. Las edades también resultan discriminatorias, «con niveles mínimos para quienes no alcanzan los 18 años y disparándose por encima del 100 por cien 139,7 a partir de los 65 años por la escasa población femenina que trabaja a partir de esa edad».
Y he aquí la segunda consecuencia: percibir una renta salarial baja condiciona las cantidades al cobrar la prestación por desempleo y reduce la cuantía de la pensión. En Andalucía, la diferencia en las prestaciones era poco significativa hasta 2007, pero a partir de ahí se disparó hasta el 26,8 por ciento de 2009 para situarse en 2012 en el 22,3 por ciento, con 711 euros anuales de distancia entre el hombre y la mujer. En el caso de las pensiones, la desigualdad aumenta, con un 35,4 por ciento y 3.444 euros menos para las mujeres.
Premios Lavanda CCOO Sevilla ha decidido este año poner en marcha la edición de un premio que pretende «reconocer a hombres y mujeres que se han destacado en la lucha por la igualdad», según explica la secretaria de la Mujer del sindicato en la provincia, Teresa García. Se trata de los premios Lavanda, que se entregarán el próximo lunes y que el jurad ha decidido que recaigan en su primer año sobre Eva Rodríguez y Magdalena López, «figuras imprescindibles por el derecho a decidir» y que representan el «pasado, presente y futuro de una misma problemática» al trabajar en la defensa de la formación sexual y de la libertad de elección de ser madre o no, indicó Teresa García; a los hombres y mujeres que forman parte de los centros de atención a la mujer en la provincia, «que han conseguido un cambio de mentalidad muy importante en el medio rural»; al programa de empoderadas en la formación en materia sindical del sindicato Comfia de CCOO de Sevilla, y a Loren Cabral, mujer que puso en marcha dos programas de atención legal muy importantes para las mujeres y que desarrolló un papel de especial relevancia al frente de la secretaría de la Mujer de CCOO Andalucía, detalló el sindicato en una nota.
