La Caixa aprobó ayer su transformación en banco convirtiendo a su holding de participadas Criteria en Caixabank, del que tendrá el 81,1% de las acciones, mientras que el 19% restante corresponderá a los actuales 310.000 accionistas de Criteria, según acordaron los consejos de administración de La Caixa y Criteria. El objetivo, reforzar su posición ante las nuevas exigencias del Gobierno al sistema financiero español.
La Caixa, que presentará hoy sus resultados del ejercicio 2010, traspasará su negocio bancario a Caixabank -que tendrá un valor contable de 20.600 millones de euros- y que también agrupará el negocio asegurador (Vidacaixa, Vidacaixa Adeslas y Caixavida) y las participaciones en bancos internacionales y en gestoras de instituciones de inversión colectiva, así como de Telefónica y Repsol.
Por su parte, Criteria trasladará parte de sus participaciones industriales en Gas Natural Fenosa, Agbar, Abertis, Port Aventura y Mediterránea Beach & Golf a una nueva entidad que dependerá al 100% de La Caixa, en la que incluirá su Obra Social.
El acuerdo marco alcanzado para la reorganización del Grupo La Caixa conlleva, por tanto, un canje de activos por el que La Caixa cederá su negocio bancario a Criteria a cambio de una parte de su cartera industrial y de acciones de nueva emisión por un importe total estimado de 2.000 millones de euros.
En esta nueva estructura, el peso de los negocios financieros sobre el valor de los activos de Caixabank será del 75%.
Caixabank nacerá con un core capital -capital propio más reservas- del 10,9%, según los cálculos de La Caixa tomando como referencia los criterios de Basilea II, después de que Criteria realice una emisión de bonos convertibles de 1.500 millones que se colocarán vía la red de La Caixa.
La operación está previsto que culmine antes de agosto de 2011.
El presidente de La Caixa y de Criteria, Isidre Fainé -también presidente de la patronal de las cajas CECA-, afirmó que la reorganización de La Caixa es un "hito" en la historia centenaria de la entidad y defendió que es la opción que mejor se adapta a los nuevos retos del entorno financiero internacional.
En un comunicado, Fainé reiteró que la reordenación del grupo es el mejor camino para fortalecer la entidad, al tiempo que se mantiene su compromiso con la Obra Social y se preserva íntegramente su personalidad como caja de ahorros. "Esta operación se enmarca en un proceso de profundo análisis sobre la configuración del grupo, que empezamos hace ya bastantes años", afirmó, al recordar que la salida a bolsa de Criteria en 2007 ya fue un primer paso hacia la reorganización anunciada ayer.
Por su parte, el director general de La Caixa, Juan María Nin, consideró que la reorganización representa una gran oportunidad para el grupo La Caixa, que podrá mantener su configuración jurídica, todos los negocios actuales, la Obra Social y los acuerdos con los empleados.
"La nueva organización permitirá contar con vías de acceso a capital para aprovechar oportunidades de crecimiento orgánico e inorgánico que pueden producirse en los próximos años", aseguró Nin.
En paralelo, el consejero director general de Criteria Caixacorp, Gonzalo Gortázar, afirmó que los accionistas del holding se convertirán en accionistas de una entidad líder y solvente.
A juicio de la entidad, esta estructura permitirá desarrollar el nuevo Plan Estratégico 2011-2014, presentado a los órganos de gobierno, que se marca como objetivos "el refuerzo del liderazgo en banca minorista, la mejora de la diversificación del negocio, el crecimiento a nivel internacional, la consolidación de la fortaleza financiera y la mejora de la rentabilidad".
Caixabank nacerá con 5.409 oficinas y una de las menores ratios de morosidad (3,71%), según la entidad, que detalló que a 31 de diciembre de 2012, el core capital con Basilea III será superior al 8%, sin considerar el periodo transitorio (2013-2019).
