El ministro del Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba inauguró ayer la nueva comisaría de Policía Nacional que funciona desde la pasada semana en un flamante edificio ubicado en el popular barrio de Rabesa.
Estos terrenos cedidos por el Ayuntamiento, han sido motivo de agradecimiento por parte del Ministro del Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba, quien reconoció que el Ayuntamiento de la localidad ha sido de gran ayuda en la construcción de la nueva comisaría, "pues al ceder el suelo se han podido agilizar todos los trámites y las obras. De esta forma los ciudadanos pueden disfrutar de un servicio que les hará sentirse más seguros explicó el ministro.
Para el responsable de Interior la c onstrucción del inmueble es "un acto de responsabilidad compartida, pues aunque una comisaría de policía es competencia del Estado, en este caso hemos contado con toda la ayuda del consistorio alcalareño".
Rubalcaba felicitó la labor que realizan los componentes de los Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado porque, según explicó, "después de dos años al frente del ministerio del Interior lo más preciado que tiene esta institución son sus profesionales", y añadió que la prueba es "la excelente imagen que tiene en el ciudadano tanto la Policía Nacional como la Guardia Civil".
"Si algo he aprendido en estos años -continuó- es que tenemos que confiar en nuestra Policía porque, de hecho, hoy tenemos las tasas de esclarecimiento de delitos más altas de la historia", remarcó el ministro del Interior.
Por su parte, el Alcalde de la ciudad, Antonio Gutiérrez Limones, habló sobre la ubicación de esta comisaría que, según dijo "viene a afianzar el compromiso que el Ayuntamiento adquirió hace unos años con esta barriada, contribuyendo así a su desarrollo".
Han sido necesarios varios años de espera y un cambio de gobierno para que el edificio sea una realidad, ya que en su día, concretamente el ocho de enero de 2004 el entonces ministro de Interior, Angel Acebes se comprometió a poner en marcha la comisaría. Un compromiso que quedó paralizado y que luego reanudó el gobierno socialista tras la declaración de ruina de la anterior sede de la comisaría.
Situada entre las calles Rafael Beca y Maestro José Casado, la nueva comisaría ha costado más de tres millones de euros y está construida en una parcela de 8.000 metros cuadrados en la que se comparte espacio con un centro de salud y una extensa zona para aparcamientos.
EL EDIFICIO. La nueva comisaría tiene salas para expedir el nuevo DNI electrónico y un departamento de extranjería, además de la oficina de denuncias, y cuenta con las últimas innovaciones tanto en seguridad, como en funciones para agilizar los trámites.
Con dos plantas y situada sobre un desnivel que convierte la primera en el acceso principal, deja en el semisótano el garaje oficial y los calabozos, así como unas dependencias para los letrados que asistan a los detenidos, la sala en la que se realizan las ruedas de reconocimiento...
La parte pública del edificio, está situada en la planta superior, en la que, tras el pertinente control, el visitante podrá llegar a las oficinas de las denuncias, del DNI o de Extranjería para realizar consultas o trámites. En la misma parte, aunque independientes, están otras instalaciones como el centro operativo de telecomunicaciones o la zona de archivos.
En el nuevo edificio trabajan desde el pasado día 17 un total de 110 efectivos.
