Sevilla registró el año pasado menos delitos en general que en 2012. Sin embargo, los más graves, los asesinatos y homicidios, se duplicaron, con 14 muertes violentas frente a las siete del año pasado, de ahí que el descenso de la criminalidad del 2,2% fuera menor que en el resto de la comunidad. Los asesinatos y homicidios consumados fueron los únicos delitos que crecieron. Curiosamente, los robos y hurtos donde en principio podría esperarse un aumento ante las necesidades económicas provocadas por la crisis descendieron. La delegada del Gobierno en Andalucía, Carmen Crespo, mostró su satisfacción por que «se ha frenado la tendencia ascendente» de este tipo de delitos registrada en los últimos años y destacó el trabajo realizado con la mejora de los planes nacionales contra el robo a viviendas, el establecimiento de dispositivos específicos en zonas de segunda residencia donde eran más frecuentes y la activación de un plan específico contra la delincuencia itinerante, además de las campañas de información y prevención y la mejora de la coordinación entre los grupos especializados de la Policía Judicial, la Policía Científica y de Seguridad Ciudadana para investigación y persecución de estas actividades. En total, según el balance del Ministerio del Interior con los datos de los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado y la Policía Local, en la provincia de Sevilla se registraron el año pasado 91.062 delitos o faltas, un 2,2% menos que el año anterior. Los delitos violentos bajaron un 5,3%, robos con violencia un 7,6%, los robos con fuerza un 3% y los robos con fuerza en domicilios un 2,1%. La sustracción de coches y motos descendió especialmente, un 8,9%, mientras que el tráfico de drogas bajó un 4%. También los delitos de daños registraron un importante descenso del 8,2% mientras que los hurtos fueron los que menos bajaron, apenas un 0,8%. De hecho, un tercio de los delitos ocurridos fueron hurtos (32.422), seguidos de los robos con fuerza (18.104), los de daños (7.982), los robos con fuerza en domicilios (4.229), la delincuencia violenta (3.545), los robos con violencia e intimidación (2.924), la sustracción de vehículos a motor (2.199), el tráfico de drogas (349) y los homicidios y asesinatos (14). Es un descenso inferior al registrado de media en Andalucía, donde la criminalidad bajó un 5,3%, con 377.846 delitos y faltas, entre ellos 65 homicidios y asesinatos, cuatro menos que el año anterior, lo que supone un descenso en esta tipología del 4,4%. Con todo, Sevilla no fue la única provincia andaluza en la que aumentaron las muertes violentas, que también crecieron en Málaga y en Jaén (con 18 y 6 casos respectivamente) y sobre todo en Córdoba, al pasar de dos a cinco asesinatos. Se villa se sitúa así como segunda provincia andaluza tras Málaga con más crímenes mortales. Crespo destacó que, «como fruto de la eficacia policial» y el esfuerzo de los agentes, los delitos esclarecidos alcanzan la tasa del 48,6%, que supone una subida de tres puntos porcentuales respecto al año 2012. En el ámbito de la prevención, la delegada del Gobierno en Andalucía subrayó que las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado desarrollan actualmente 19 planes sectoriales de actuación, dirigidos a dar respuesta a las distintas necesidades en materia de seguridad en Andalucía, como la prevención y el consumo de drogas en los centros escolares y de ocio, la protección de los menores de edad y la tercera edad, la lucha contra la explotación sexual infantil, o la prevención de la seguridad de las personas mayores, además de otros cíclicos