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La crisis deja a mitad cuatro grandes urbanizaciones de Utrera

Más de 2.000 viviendas de las previstas en el PGOU siguen sin ejecutar por la crisis, lo que llena algunas promociones de solares vacíos.

el 16 dic 2010 / 18:10 h.

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El parón inmobiliario por la crisis deja Utrera sin “casi 2.000 viviendas” de todas las que estaban proyectadas en las nuevas áreas residenciales de la ciudad, como los Ruedos de Consolación, la Cuesta del Merendero y Vistalegre. Son los datos que maneja el alcalde, Francisco Jiménez (PA), quien lamentó la situación que viven los vecinos de las fases que sí están terminadas.

De este modo, los sectores previstos en el Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) no se están ejecutando en su totalidad y solamente esté edificado entre un 40% y un 60%. Los vecinos sufren problemas en sus barriadas por la presencia de solares al a espera de tiempo mejores. En ello existe un concepto clave, que es el de recepción. Y es que para que el Ayuntamiento de Utrera pueda hacerse cargo de estas deficiencias es necesario primero que todo haya sido urbanizado por los constructores en cuestión.

El área con más problemas es la de los Ruedos de Consolación, donde hay numerosos solares abandonados. “Hay ya 15 expedientes contra los dueños de estos solares, pero lo cierto es que no es fácil actuar sobre ellos, porque muchas de las empresas se han declarado en bancarrota debido a la crisis”, explicó el alcalde. Hay que unir a las deficiencias que todavía no se puedan contratar servicios de ADSL, aunque el Ayuntamiento de Utrera se encuentra en conversaciones con varias plataformas de telefonía.

El barrio de Vistalegre tampoco está todavía recepcionado, aunque el regidor puntualizó que el Ayuntamiento de Utrera “sí recoge la basura, patrulla la Policía Local y se limpian las calles, aunque no tienen contenedores de reciclaje, ya que es un tema que depende de la Mancomunidad del Bajo Guadalquivir”.

De todas las nuevas barriadas, es la Cuesta del Merendero la que, por cercanía, la que está más integrada en Utrera. “Han tenido lugar robos de cableado, pero, en este caso, al no estar recepcionado, el tema es responsabilidad del constructor”, apuntó Jiménez.

Por último, casi la totalidad del sector del Naranjal de Castillo está recepcionado, quedando únicamente algunas manzanas.

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